Energías Renovables ha buscado diez preguntas y ha decidido planteárselas a una serie de mujeres del sector de la energía. Unas han decidido contestarlas. Otras han dicho que no, que tenían problemas de agenda, o que no esperaban un cuestionario como este, o que estaban de viaje, o no han dicho nada. Cristina Narbona ha sido una de las mujeres que ha dicho que sí. Estas son las preguntas. Estas son sus respuestas.
¿Qué tiene que ver la energía con el género?
Mucho: la gran mayoría de las mujeres -tengan o no un trabajo fuera de su hogar- son las que mayor conciencia tienen del uso y del coste de la energía.
Si hubiese que asignarle un género a las energías renovables, ¿cuál sería? ¿Por qué?
Femenino. Las energías convencionales se desarrollaron y alcanzaron su máxima expansión en un sistema económico dominado por el paradigma masculino, muy asociado a la concentración de poder y a la competencia. Las energías renovables se desarrollan, en cambio, de forma muy descentralizada, incluso haciendo coincidir la condición de consumidor con la de productor, contribuyendo a reforzar una economía más colaborativa.
Si hubiese que asignarle un género a los combustibles fósiles, ¿cuál sería? ¿Por qué?
Esta pregunta y la siguiente están de hecho contestadas en la anterior: las energías convencionales suponen, además, consecuencias muy negativas para el planeta: algo que no ha preocupado cuanto debería a los máximos responsables políticos y empresariales de nuestra sociedad (la inmensa mayoría de ellos, hombres).
Si hubiese que asignarle un género a la nuclear, ¿cuál sería? ¿Por qué?
También masculino, por supuesto. La energía nuclear supone un legado de alto riesgo para las generaciones futuras... y, ¿quién se preocupa más por las generaciones futuras?
Impuesto al Sol, ¿sí o no?
Es absolutamente urgente la derogación de esta norma, para incentivar el autoconsumo, como en la mayoría de los países de nuestro entorno.
Nuclear, ¿sí o no?
No. En España se puede perfectamente establecer un calendario de cierre de las centrales existentes, teniendo en cuenta la sobrecapacidad de generación de electricidad que existe en nuestro país y el rápido abaratamiento de las tecnologías del uso de las energías renovables.
Carbón, ¿sí o no?
También en este caso estamos en condiciones de establecer un calendario de abandono del uso del carbón en España, comenzando por el carbón importado, y garantizando una transición justa en los territorios concernidos, igual que debe hacerse en las comarcas con centrales nucleares. En el caso del carbón autóctono, esa transición justa, con iniciativas concretas para generar empleo alternativo, resulta especialmente urgente: hay que anticiparse a las decisiones empresariales, implicando por supuesto a las propias empresas.
¿Cómo adjetivarías el gas?
Como una energía de transición, que permitirá avanzar hacia los objetivos de uso masivo de las energías renovables.
¿Vas a hacer huelga el ocho de marzo? ¿Por qué?
Sí. Porque hay que hacer visible la desigualdad y la discriminación, que todavía existen, incluso en un país como España, donde hemos avanzado mucho más que en otras partes del mundo. Además, este año hay una oleada de indignación y de denuncia que se extiende a escala global, y que hay que aprovechar...
¿Qué pregunta debí hacer y no he hecho?
Alguna sobre la importancia del ahorro y de la eficiencia en la necesaria transición energética: algo que las mujeres entienden y practican, sin ninguna duda, muchas más mujeres que hombres...
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