Energías Renovables ha buscado diez preguntas y ha decidido planteárselas a una serie de mujeres del sector de la energía. Unas han decidido contestarlas. Otras han dicho que no, que tenían problemas de agenda, o que no esperaban un cuestionario como este, o que estaban de viaje, o no han dicho nada. Pilar Blanco Fernández (abajo incluimos una breve reseña autobiográfica) ha sido una de las mujeres que ha dicho que sí. Estas son las preguntas. Estas son sus respuestas.
¿Qué tiene que ver la energía con el género?
En abstracto, la energía tiene que ver con el género lo mismo que la religión, nada. Pero, si observamos el detalle, el mayor consumo energético es en el hogar (calefacción, electrodomésticos, iluminación...) y en este ámbito somos las mujeres las gestoras del consumo y las que nos encargamos de pagar las facturas.
Si hubiese que asignarle un género a las energías renovables, ¿cuál sería? ¿Por qué?
Sustantivo femenino, plural y común. Sería femenino, ya que favorece la independencia -la utilización local, allí donde se necesita- y favorece el crecimiento de la comunidad que la "explota", lo que hacemos todas las madres con nuestros cachorros.
Si hubiese que asignarle un género a los combustibles fósiles, ¿cuál sería? ¿Por qué?
Masculino, pero por su forma de gestión. Se ha utilizado como medida de poder y extorsión por algunos grupos para conseguir y mantener beneficios o que se mantengan determinadas situaciones de desigualdad. Se utilizan los combustibles fósiles como algunos utilizan sus musculitos.
Si hubiese que asignarle un género a la nuclear, ¿cuál sería? ¿Por qué?
Femenino, representa los estereotipos del género, gran capacidad, larga duración y hay que conocerla bien para manejarla de forma segura.
Impuesto al Sol, ¿sí o no?
No.
Nuclear, ¿sí o no?
Sí.
Carbón, ¿sí o no?
No para uso industrial, sí para uso particular en determinadas zonas.
¿Cómo adjetivarías el gas?
Como la cara amable de una enfermedad crónica, es el menos malo de todos tus males.
¿Vas a hacer huelga el ocho de marzo? ¿Por qué?
Sí, por mis hijos. Yo lo he tenido mejor que mi madre y mi padre, pero desde luego esto que tenemos no es igualdad. Haré lo que pueda porque ellos estén mejor que yo y, si consigo ver que mis nietas cobran lo mismo que sus compañeros varones o que mis nietos pueden quedarse cuidando a sus hijos sin que les insulten... habrá merecido la pena.
¿Qué pregunta debí hacer y no he hecho?
¿Crees que es bueno el cambio a renovables? ¿Por qué? Ah, y de paso respondo: sí, debemos estar agradecidos a los combustibles fósiles porque nos han permitido llegar hasta aquí, pero ahora hay que hacer un cambio completo (en matemáticas sería un punto de inflexión). No es solo cuestión de cambiar algunas leyes para que todo siga igual; hay que cambiar completamente la forma de pensar, de vivir, de convivir. Para que los seres humanos sigamos viviendo mucho tiempo en este planeta es necesario cambiar el prisma en cuanto al género y a las energías.
Le pido una breve reseña autobio -quiero utilizar algún dato en la entradilla- y así me escribe, que yo no puedo hacerlo mejor. Así que copio-pego
«Nací en Madrid en el 72 y, como la mayoría de los madrileños, mis padres son de dos pueblos pequeñitos de Castilla-León. Tengo el mejor marido del mundo y dos niñas adolescentes y un hijo prepuberal que son mi gozo y mi quebranto. Me doctoré en ingeniería naval por la Escuela de Navales de la Universidad Politécnica de Madrid con un trabajo sobre aprovechamiento energético del océano y trabajo en el Departamento de Pruebas del Astillero de Navantia en Puerto Real. En mi anterior proyecto fui la Jefa de Pruebas de una Subestación Offshore de un campo eólico marino en el Mar Báltico y en el actual soy Jefa de Documentación y Mantenimiento de otra Subestación Offshore para un campo eólico marino en el Mar del Norte".
