Contigo Energía es filial de la comercializadora de
kilovatios verdes Gesternova, filial especializada en el
diseño, financiación e instalación de autoconsumo solar para hogares y empresas. Si Gesternova se gana la vida vendiendo electricidad limpia y el autoconsumo es, sobre todo, ahorro, ¿le está quitando negocio la filial a su matriz?
No es esta la primera vez que nos lo preguntan... El autoconsumo es un camino imparable en el que queríamos estar, porque de lo que hablamos es de la electrificación de la demanda. No creemos que reste; creemos que complementa. Además, no podemos obviar el derecho que todo ciudadano tiene en la Unión Europea a autoconsumir energía. Por eso Contigo Energía se llama así. Porque no nos conformamos con vender una instalación y desentendernos: nosotros queremos recorrer el camino de la transición energética contigo, con nuestros clientes.
Contigo Energía llegó al mercado en junio de 2017 con el foco puesto en el autoconsumo, pero también en otras dos líneas de negocio: la climatización (aerotermia con bomba de calor) y la movilidad eléctrica. ¿Cómo va el negocio? ¿Cómo va cada una de esas líneas?
Bueno, esas eran las líneas que queríamos seguir, al hilo de las líneas que trazaba el famoso Winter Package. Y contesto a la pregunta: el autoconsumo está el primero, la climatización va en segundo lugar y la movilidad eléctrica es algo que hacemos con menos intensidad... De todos modos, sabemos que el vehículo eléctrico es algo que también ha venido para quedarse.
Busco en contigoenergia.com la sección de dudas, preguntas y respuestas relacionadas con el autoconsumo. Y resulta
que la primera duda está relacionada con el impuesto al Sol.
El impuesto al Sol fue derogado en octubre de 2018. ¿Sigue habiendo dudas sobre el particular?
Pues, aunque parezca mentira, todavía es algo que nos preguntan de vez en cuando. Más allá de eso, en todo caso, el verdadero freno al autoconsumo no fue tanto ese cargo como las trabas administrativas y las complicaciones técnicas que el real decreto establecía... Otro freno fue que el autoconsumo compartido no era posible, lo cual también limitaba el crecimiento del sector. Afortunadamente, hoy todas esas barreras se han eliminado.
El sector en pleno se queja de que todavía no hay decreto de acceso y conexión. ¿En qué medida le perjudica al autoconsumo ese vacío? ¿O por qué?
Esa es una muy buena pregunta. Yo creo que la expectativa de cambios regulatorios es tan paralizadora como la propia incertidumbre regulatoria. Muchos clientes posponen la decisión de montar una instalación de autoconsumo por estas cuestiones. Esto paraliza el desarrollo; y atrasa el ahorro. Cuanto antes empecemos a ahorrar, antes amortizaremos la instalación. Además, tampoco podemos depender eternamente de un cambio regulatorio que lleva años anunciándose. El Real Decreto 1955 es del año 2000, y siempre hemos estado esperando cambios. Pero lo cierto es que, con ese real decreto, que todo el mundo dice que está obsoleto... hay decenas de miles de megavatios en fase de tramitación administrativa y saliendo adelante. O sea, que no parece que eso sea un problema. Llevamos haciendo renovables veinte años con ese real decreto. Pasa lo mismo con las subvenciones: como muchas comunidades autónomas, muchos ayuntamientos, dan subvenciones, lo que al final estamos haciendo es congelar la toma de decisiones de las empresas. Al final, ni se desarrolla el sector, el autoconsumo, ni ganamos en eficiencia... Y el autoconsumo es una solución de eficiencia energética y ahorro. Lo que necesitamos es que el marco regulatorio no sea cambiante.
Otra de las quejas habituales en el sector va dirigida al asunto de la potencia. La potencia –lo que el consumidor paga consuma lo que consuma– pesa en la factura española un 40%, mientras que los países de nuestro entorno están en el 23-25- 27%. La alternativa es que ese 40 se reduzca y tenga más peso la parte variable, es decir, la correspondiente a la cantidad de kilovatios hora que uno consuma. Así es como todo el mundo coincide en considerar que se fomenta el ahorro. Y una medida de ahorro es el autoconsumo. Por lo que un peso alto de la parte fija estaría perjudicando al desarrollo del autoconsumo. ¿Qué opina sobre el particular el presidente de Contigo Energía?
El hecho de que potencia y costes regulados pesen entre el 55 y el 60% en la factura y la energía solo entre el 35 y el 40% es evidentemente negativo, porque minimiza nuestras posibilidades de ahorro y de eficiencia. Todas las medidas que apliquemos en realidad solo tienen efecto sobre un 40% de nuestra factura.
¿Qué ofrece Contigo Energía que no ofrezca la competencia?
Ofrecemos solvencia económica y técnica no solo para ejecutar una instalación sino para darle todo tipo de facilidades al cliente, para que no tenga que hacer un esfuerzo económico. Con nuestro producto, los clientes empiezan a ahorrar desde el primer momento, sin tener que poner un duro y sin tener que endeudarse. Nuestros clientes pagan sus instalaciones con el ahorro que producen al autoconsumir energía. Ahora cumplimos quince años. Somos una empresa que ya tiene un recorrido en el sector y que, sobre todo, tiene mucho futuro por delante. Y eso es importante cuando pensamos en una instalación que va a tener una vida útil por delante de al menos 25 años. En ese sentido, creo que es importante saber que quien nos ha hecho la instalación va a estar ahí durante toda la vida útil de esta por si hubiese algún problema; es importante que el cliente sepa que no se va a encontrar desamparado dentro de unos años porque resulta que el instalador que te hizo la instalación hoy se dedica a... yo qué sé... poner antenas colectivas o a cualquier otro negocio completamente ajeno.
¿Qué tipo de clientes se acerca a Contigo Energía buscando autoconsumo?
Los que están plenamente convencidos de que tenemos que hacer algo por el medio ambiente; los que vienen buscando ahorrar en el recibo de la luz... Es más: esos dos objetivos pueden ir juntos, pueden ser perfectamente compatibles. En todo caso, lo que nosotros siempre hemos tenido como máxima, como premisa, es que, a nuestros clien- tes, fuesen cuáles fuesen sus motivaciones, les teníamos que ahorrar dinero. La sostenibilidad, sin el retorno económico, no tiene sentido para nosotros. Al final, cuando hablamos de kilovatios hora, de lo que estamos hablando en realidad es de euros. Porque, insisto, una de las razones principales por las que la gente quiere autoconsumo es porque quiere ahorrar dinero, que es algo que me parece muy loable, por otra parte.
La compensación de excedentes ya está aquí. Pero da la sensación de que aún no lo está del todo. ¿Qué queda por aclarar? Y, sobre todo, ¿cómo está haciéndola Contigo Energía?
Quedan algunos flecos, sí, en lo que se refiere a la compensación de excedentes. Pero aquí a mí me gusta ser un poco Pepito Grillo, y aterrizar las expectativas de los clientes cuando hablamos de los excedentes. Nosotros vamos a fijar la compensación de excedentes valorando a un precio de 0,40 euros kilovatio hora a los clientes domésticos. Con los clientes industriales queremos que sea un acuerdo mutuo. Pero tenemos que tener en cuenta que una instalación fotovoltaica para auto- consumo, que es una solución de ahorro (de ahorro de electricidad, de ahorro de dinero), nosotros vamos a querer dimensionarla siempre de modo tal que los excedentes sean los menos posibles. No tiene sentido montar una instalación de autoconsumo contando con que el retorno va a venir de la venta de excedentes. Eso va en contra del ahorro. Y va en contra de la lógica razonable. El autoconsumo es una instalación para ahorrar, no para ganar dinero. A mí me da miedo que alguien haga una instalación de autoconsumo, sea una empresa, sea un particular, con la expectativa de vivir de los excedentes de sus instalaciones. Los excedentes contribuyen a la amortización de la instalación, como es razonable, pero si hacemos un cálculo de los excedentes que puede tener una instalación de dos kilovatios y medio nos damos cuenta de que, expresado en kilovatios hora o expresado en euros, la cantidad es ridícula. Lo que hay que hacer si tenemos una instalación de autoconsumo en nuestra casa es intentar adaptar nuestro consumo a la curva de generación para que así podamos amortizar nuestra inversión cuanto antes. Por hacer cálculos rápidos: si estamos comprando, y de media estamos comprando, a 130 euros el kilovatio que viene de la red, lo que debemos hacer es tratar de consumir los más kilovatios hora que produzcamos.
Y, para acabar... ¿un par de pinceladas sobre Teresa Ribera?
La conocí cuando no era ministra. La invitamos a uno de los fo- ros que organiza Gesternova, cuando ella dirigía en París el Instituto de Desarrollo Sostenible y Relaciones Internacionales. Tiene las ideas clarísimas. Tiene una gran capacidad de trabajo. Está muy preparada. Conoce muy bien los criterios. Conoce muy bien los objetivos a los que nos dirigimos. La transición energética es algo que está muy metido en su cabeza. Y creo que tenemos la suerte de que ella sea la que conduzca el barco de la transición energética en España. Independientemente de cuál sea su filiación política. Porque aquí las medidas de lucha contra el cambio climático o el modelo de transición energética creo que son asuntos que deben desideologizarse y despolitizarse. Porque, al final, es algo que nos afecta a todos. El cambio climático es de las cosas más democráticas.
