– ¿Por qué y cuándo decidió Acciona Energía crear un área de negocio de Generación Distribuida?
En Acciona Energía creamos una unidad dedicada a Generación Distribuida hace dos años, en 2019. Las principales razones fueron tres. En primer lugar, alinearnos con las tendencias del mercado, que apostaba por el desarrollo de este tipo de generación a menor escala. Los proyectos “in situ” incrementan la eficiencia del sistema eléctrico al evitar las perdidas asociadas al transporte y facilitan una mayor penetración de las renovables, al estar muy vinculados a la energía solar fotovoltaica, una tecnología de fácil colocación en espacios desaprovechados, como cubiertas. En segundo lugar, porque apostar por la generación distribuida en sectores como la industria o la agricultura es el objetivo estratégico de Acciona Energía de estrechar las relaciones con sus clientes ofreciéndoles un abanico más amplio de soluciones para su descarbonización. Por último, la unidad está directamente ligada a la visión y ADN del grupo Acciona de “ser expertos en diseñar un planeta mejor”.
– ¿Qué cartera de soluciones ofrecen?
Ofrecemos un modelo de contrato energético a largo plazo, conocido en el mercado como PPA on-site. El cliente paga por la energía que consume y, por tanto, no tiene que desembolsar ninguna inversión, ni acometer ningún gasto de operación para mantener las instalaciones de generación en sus instalaciones. Acciona Energía se encarga de todo y sólo cobra por la energía como un servicio. Creemos que es un modelo de futuro ya que los clientes pueden poner el foco en su actividad principal despreocupándose de la instalación renovable que tienen en su planta y consiguiendo un mejor precio para la energía que necesitan.
– ¿Por qué la generación distribuida se ha convertido en una tendencia con gran potencial de crecimiento en el mercado energético?
La mayor parte de los países en los que operamos en el mundo están promulgando normativas favorables al desarrollo de la generación distribuida. Por ejemplo, en España, al igual que en otros países, se exime a las empresas de los peajes de distribución, ya que la energía se genera en sus instalaciones y se consume allí mismo. Esta ventaja da margen a que plantas de pequeña escala permitan una tarifa más económica para el cliente frente a la tarifa que tendría que pagar si consumiera energía de la red. Es lógico que los gobiernos promuevan este tipo de esquemas regulatorios, porque es energía limpia, renovable y sin pérdidas; pero, además, genera claramente otros impactos colaterales como empleo local y diseminado en el territorio.
– ¿Qué ventaja aporta el autoconsumo a las empresas?
A fecha de hoy, en la UE se han marcado ambiciosos objetivos de reducción de emisiones por la lucha contra el cambio climático, y la fuente de generación de energía es uno de los focos de actuación en el sector industrial. Por eso, la principal ventaja del autoconsumo renovable es que contribuye a los objetivos de descarbonización en este sector.
Para las empresas, la descarbonización resulta clave por dos motivos. Por un lado, las tendencias de mercado nos dicen que los consumidores finales valoran cada vez más los esfuerzos de las marcas en ser sostenibles. Y las marcas encuentran así en la sostenibilidad y la reducción de emisiones un elemento clave para su negocio. Un segundo motivo es la reducción de costes. La generación distribuida basada en contratos a largo plazo genera ahorro en la factura energética y evita el impacto negativo del alza del precio del CO2 en las cuentas de las empresas.
– ¿A qué sectores y para qué tipo o tamaño de proyectos aporta más ventajas competitivas?
Las ventajas crecen con la escala de los proyectos: los mejores precios del PPA se dan en aquel perfil de cliente que es consumidor electrointensivo y dispone de espacio suficiente para hacerle una planta de mayor tamaño. Al final, el mejor precio se consigue por escalabilidad, y el mayor ahorro, por más cantidad de energía generada. Así que, idealmente, la combinación de grandes consumos con gran capacidad de generación resulta en propuestas comerciales sumamente atractivas. Cuando un cliente consume 24x7 y dispone de espacio, estamos valorando la alternativa hibrida con aerogeneradores eólicos, lo que permitiría, además, cubrir los consumos nocturnos.
– ¿Cuál es la situación de la generación distribuida en los mercados internacionales y qué diferencias hay con el mercado español?
La capacidad de penetración y la calidad de la red de distribución eléctrica en el territorio y el impacto de los precios de la energía en la actividad empresarial marcan la diferencia en la escala de proyectos. Países con mayor actividad minera, que es uno de nuestros principales targets, con explotaciones aisladas o remotas, pueden tener plantas de autoconsumo de cientos de MW. En estos términos es donde se ve la potencialidad real de la generación distribuida a nivel mundial, que no se queda sólo en algunas cubiertas solares en zonas industriales donde la capacidad de espacio limita la opción de dar generación in situ.
En Australia, por ejemplo, hay empresas mineras que pueden llegar a montar microrredes renovables de cientos de MW para evitar el impacto climático y económico del transporte y consumo de diésel. Desde Acciona Energía estamos haciendo propuestas interesantes y novedosas para este cambio de modelo.
