Este primer prototipo mide trece metros de largo y tres de ancho, dimensiones que corresponden a una escala real 1:3, e incluye diez turbinas cuyo diseño es único, ideadas por el catedrático y experto en mecánica de fluidos José Javier Doria (cofundador y presidente de Arrecife). Tiene una potencia de 75 kW, el peso del sistema es de 9,9 toneladas y se ha pintado de color coral en un homenaje a la estructura subacuática que imita. Como su nombre indica, la tecnología de Arrecife Energy Systems se inspira en los arrecifes de coral que, con su morfología, provocan que las olas rompan. Esa energía generada al romperse las olas es la que quiere aprovechar la start-up para producir electricidad.
El lanzamiento ha tenido lugar en el puerto de Laredo (Cantabria) y ha incluido la realización de varios estudios. Tras transportarlo allí desde Vizcaya, primero se colocó en el agua para estudiar su estabilidad y nivelación. Posteriormente se procedió a analizar el funcionamiento de su sistema de inmersión, diseñado para sumergir el prototipo en caso de darse olas de más de 5 metros de altura. También se arrastró con remolcador a alta mar para observar la dinámica de sus turbinas. Finalmente, tras mantenerlo fondeado en el puerto varios días, el prototipo ha sido retirado. El estudio del comportamiento del prototipo continuará en septiembre en el área de pruebas de la Biscay Marine Energy Platform (BIMEP), la plataforma de investigación de energías marinas del País Vasco ubicada en Arminza.
“El mero hecho de ver nuestro primer sistema a escala real flotando en alta mar ha sido muy emocionante. Hace un año soñábamos con ese momento y ya ha llegado. Pero toca ser prudentes y esperar a las pruebas en BIMEP”, ha declarado Iñigo Doria Elejoste, CEO de Arrecife Energy Systems. Jagoba Artetxe, CEO de Tacomi, añade que “haber cumplido los tiempos marcados para este sistema son un reflejo de la compenetración entre Arrecife y Tacomi y del esfuerzo dedicado al proyecto”.
Arrecife Energy Systems lleva varios éxitos encadenados. Tras su paso por Estados Unidos, donde fueron finalistas del MIT Water Innovation Prize así como vencedores del 2017 Global Marine Technology Entrepreneurship Competition en Boston, la start-up obtuvo 50.000 euros de la Unión Europea y ha logrado el Sello de Excelencia de la Comisión Europea en tres ocasiones seguidas. Además, este año ha obtenido el premio Sustainability Vertical concedido por Extreme Tech Challenge, competición de Richard Branson que identifica las innovaciones que puedan resolver los mayores problemas mundiales.