El premio, entregado en el marco del encuentro anual del Colegio de Caminos celebrado en Bilbao, reconoce la capacidad de innovación que tuvieron los responsables de BiMEP hace ya una década y destaca especialmente "la visión de futuro que permitió detectar la necesidad de las empresas tecnológicas de contar con infraestructuras de ensayo en el mar totalmente equipadas y con las autorizaciones pre-otorgadas para el ensayo de dispositivos flotantes de generación eléctrica renovable". Según el Colegio de Caminos, la puesta en marcha de BiMEP supuso todo un hito como infraestructura crítica para ensayos en el mar disponible permanentemente, una infraestructura que aportaba -presumen desde BiMEP- eficiencia en el desarrollo de la I+D, "ya que se evitaba que cada una de las empresas que desarrollaba un prototipo tuviera que realizar inversiones millonarias para poder ensayar su dispositivo en el mar, junto a los largos y laboriosos procesos administrativos para la obtención de permisos". BiMEP -explican desde la plataforma- adelantaba este proceso y ofrecía una instalación lista para enchufar y ensayar.
BiMEP explica
«Debe tenerse en cuenta que el desarrollo de un prototipo requiere de una inversión muy elevada para llevarla desde la fase inicial de concepto o idea hasta su construcción e instalación en el mar. Años de esfuerzo del equipo científico así como de búsqueda de financiación que, de no existir BiMEP, serían aún mayores tanto para la obtención de los permisos necesarios como para su conexión a la red eléctrica en tierra. Habría sido necesario invertir más tiempo, trabajo y dinero en el diseño y construcción de las líneas eléctricas submarinas, la subestación en tierra, etc. BiMEP pone todas estas infraestructuras a disposición de las empresas tecnológicas, lo que avanza tiempos, racionaliza inversiones y atrae talento de todo el mundo»
BiMEP es una empresa pública inaugurada en 2011 "para el desarrollo, construcción y operación de una plataforma de ensayos de dispositivos de generación de energía mediante las olas, así como mediante el viento con dispositivos eólicos flotantes". Cuenta con dos socios, el Ente Vasco de la Energía como entidad mayoritaria (75%), y el IDAE (25%).
Dispone de dos áreas de ensayo diferenciadas. La primera se sitúa en tierra firme, en el municipio guipuzcoano de Mutriku que le da nombre y acoge la planta de energía de las olas de esta localidad. Se trata de una planta demostrativa de esta tecnología, que opera ininterrumpidamente desde su inauguración en 2011 y que desde entonces ha producido cerca de 3.000 megavatios hora, un record mundial para esta tecnología.
En Armintza (Lemoiz, Bizkaia) se sitúa la zona de ensayos en mar abierto para dispositivos flotantes. A una distancia de tres millas del puerto de Arminza, está conectada a tierra mediante cuatro cables submarinos y permite el ensayo tanto de convertidores de olas como de plataformas eólicas flotantes.
Por estas instalaciones han recalado empresas como Zunibal, Idom, Ditrel, Arrecife y Wello. El último hito completado ha sido la instalación del primer aerogenerador flotante que, además de producir energía, está siendo objeto de estudio y seguimiento sobre su funcionamiento, rendimiento y operatividad. Pertenece a la empresa vasca Saitec, que realizará estudios durante dos años.
En el futuro inmediato se prevé la instalación de nuevos dispositivos, en el marco de una compra pública innovadora realizada junto a otros agentes europeos. Así, la ingeniería vasca IDOM instalará una versión más avanzada del prototipo que ya ensayó en BiMEP durante tres años. Por su parte, la empresa irlandesa CETO ensayará un prototipo para la optimización del rendimiento en el mar, y finalmente, en 2025 se espera instalar un segundo aerogenerador flotante aún por definir.
