Según los responsables de esta iniciativa, los actuales procedimientos de ensayo en el sector de la energía oceánica no están bien equilibrados. La mayoría de las pruebas de laboratorio se han centrado únicamente en la funcionalidad de los equipos (prueba de concepto y evaluación del rendimiento), sin tener en cuenta otras medidas clave en su rendimiento, como su capacidad de supervivencia en el medio marino.
VALID integrará los métodos usados para probar la fiabilidad y supervivencia de estas tecnologías junto con los datos pertinentes sobre los fallos de los componentes de los proyectos en curso y recientemente finalizados. Para ello, recurrirá a la experiencia de las principales empresas de investigación, como la Fundación Tecnalia y la Plataforma Biscay Marine Energy (España) o el RISE Research Institutes (Suecia), además de instituciones académicas (Universidad de Aalborg y Universidad Técnica de Delft) y expertos industriales de toda Europa.
En palabras de Pierre Ingmarsson, director principal de Proyectos de RISE,"este ambicioso proyecto supondrá un cambio radical en la prueba y la normalización de los dispositivos y componentes de la energía oceánica. Proporciona una plataforma abierta para pruebas híbridas y aceleradas que asegurarán la fiabilidad, disponibilidad, mantenimiento y supervivencia durante la vida útil de la tecnología, garantizando soluciones rentables".
El proyecto comenzó el pasado 1 de diciembre y tiene tres años de duración.