Enrique Alcor
Madrid. Abril, 1955.
Exdirector comercial de Atersa
(Marzo 2013. ER119)
Quizá fue el destino. Enrique nació en 1955, el mismo año en que se inventaron las células solares. Y aunque cuando empezaba a dar sus primeros pasos como un jovencísimo y flamante ingeniero industrial (año 77) aquello de la energía solar ni sonaba, esa tecnología se cruzó muy pronto en su camino. “Estaba trabajando en una empresa del grupo SITRE, con equipos para centrales telefónicas, y un buen día mi jefe, Fernando Monea, va y me enseña, tras haber visitado una exposición en Washington, un panel solar de 30 vatios y un catálogo. Ni idea de para qué sirve esto, me dijo, pero creo que podemos vendérselo a Telefónica”. La escena siguiente transcurre en la azotea de la empresa: “Me leo el catálogo, bajo al coche, cojo una bombilla de faro, el panel, unos cables y me subo a la terraza. Conecto la bombilla y se enciende. Desde ese momento dije: ¡esto es lo mío! En España era perfecto para casas aisladas”. Muy poco después Fernando y Enrique creaban la empresa de energía solar Elecsol y tres años más tarde nacía Atersa, buque insignia de la solar FV española y a la que Enrique ha dedicado 30 años de su vida. Ahora la deja. Pero que nadie crea que va a ejercer de retirado. La ONG Energías Sin Fronteras y la patronal solar UNEF –con las que va a trabajar en temas de cooperación– van a poder disponer ahora de él mucho más tiempo. En los ratos libres seguirá recorriendo montañas, montando en bici, escapándose en la moto… y practicando el tiro olímpico con pistola. Porque a ver cuántos pueden presumir, como él, de haber sido subcampeón de España de esta disciplina en categoría senior.