La creación de la mesa de la pobreza energética, que ha sido iniciativa del actual equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cádiz, se aprobó por unanimidad en el último pleno municipal. Esta primera reunión contó con la participación del alcalde de Cádiz, José María González; la concejala de Asuntos Sociales, Ana Fernández; el gerente de Eléctrica de Cádiz, José Luis Molina; la responsable de Desarrollo Social de Cáritas Diocesana, Cristina Vázquez; y miembros de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, Agadén, Zencer, Asamblea Popular Luis Pérez (15M) o la Universidad de Sevilla, entre otras organizaciones. Además, también participaron personas en situación de vulnerabilidad económica.
Talleres
Las primeras Jornadas sobre Transición Energética en Cádiz han incluido además dos talleres para ahorrar en el ámbito doméstico y dos mesas de debate sobre “Energía, Empleo y Bien Común: los retos de la Bahía de Cádiz” y “Alternativas desde abajo: Presentación de empresas, cooperativas renovables, plataformas y asociaciones”. Además, se proyectó el documental «#OligopolyOFF. Empieza la revolución energética ciudadana». El objetivo de las jornadas, organizadas desde el área de Medio Ambiente, con la colaboración de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético y Ecologistas en Acción, ha sido, en palabras del Alcalde de Cádiz, José María González Santos, “poner cuanto antes el debate energético sobre la mesa e iniciar un diálogo abierto e inclusivo para poner en marcha una transición energética que se centrará en la creación de empleo local”.
La nueva cultura de la energía
González Santos subrayó que “tenemos que transitar a un modelo 100% renovable y democrático, por razones sociales, económicas y ambientales, y sobre todo, éticas”. El alcalde de Cádiz reflexionó sobre las consecuencias que acarrea la no participación de la ciudadanía en la toma de decisiones en materia de planificación energética: “a los habitantes de Chernobil y Fukushima nadie les preguntó si querían vivir al lado de una central nuclear. Tampoco a los de Castellón si querían un almacén de gas y han sufrido más de mil terremotos por el almacén Castor”. González Santos aludió también a las prospecciones realizadas en Canarias, así como al fracking, como ejemplos de una política energética centralizada, autoritaria, peligrosa y sucia, que sólo beneficia a unas pocas empresas, mientras traslada a la ciudadanía sus costes y sus impactos ambientales.
Pobreza y transición
“Necesitamos transformar no sólo las tecnologías que utilizamos para generar energía, y pasar de las centrales de carbón, nucleares y de gas, a tecnologías renovables, sino que, tenemos que cambiar la forma de hacer política energética e incluir a la gente en la elaboración de planes y medidas” añadió González. Entre los temas tratados en la Mesa contra la Pobreza Energética estuvieron las inequidades en el acceso a la energía, los problemas del actual bono social actual dependiente de la normativa estatal y la propuesta de elementos y criterios del futuro bono social alternativo. Por su parte, la Mesa de Trabajo sobre Transición Energética en Cádiz se dedicó a la puesta en común de prioridades y propuestas concretas para fomentar el ahorro y la eficiencia energética en el municipio, el aprovechamiento de energías renovables y el cambio de cultura energética.
Ambas mesas -informa el Ayuntamiento de Cádiz- volverán a convocarse antes de un mes.