Esta Comisión, siguiendo las disposiciones del Decreto 178/2015 sobre sostenibilidad energética del sector público de la Comunidad Autónoma del País Vasco, establece que los vehículos que se adquieran por el sector público autonómico "deberán utilizar fuentes de energía alternativas a los combustibles derivados del petróleo"; y que, a la hora de comprar vehículos, "se deben tener en cuenta los impactos energéticos y medioambientales de utilización durante su vida útil". Así, la OSI Araba ha adquirido estos doce vehículos, cuya recarga, además, se realizará "con energía 100% renovable con certificado de origen". Para ello -informa el Gobierno vasco- se han instalado doce puntos de recarga. Según el Ejecutivo autónomo, esta se realizará en horario nocturno y el coste de cargar una batería entera será de 1,2 euros (con cada carga los vehículos eléctricos pueden realizar entre 300 y 400 kilómetros, lo que garantiza las necesidades del servicio).
La solución de recarga contratada tiene dos características que la hacen especial, según el Gobierno
Por un lado, incluye un servicio de gestión activa de la demanda por la cual se minimiza la potencia necesaria. Así, en función de los vehículos que vayan conectándose, la potencia variará de forma dinámica durante la propia recarga, siempre con la premisa de que a las 08.00 horas, todos los vehículos tienen que estar cargados en su totalidad para que el Servicio de Hospitalización a Domicilio pueda realizar su trabajo. Y, por otro, el modelo de terminal instalado es de hasta veintidós kilovatios de capacidad de carga (22 kW), lo que permite recargar el vehículo en un máximo de dos horas. Con la potencia necesaria instalada, permitirá también recargar cualquier vehículo eléctrico de la flota en un máximo de dos horas en caso de que existiera alguna emergencia.
Menekes
Todos los terminales tienen un tipo de conector (menekes), que es el más extendido a nivel europeo. Esto permite que otros coches de la flota de Osakidetza (el servicio público de salud vasco) se puedan cargar cuando estén desplazados de su base, favoreciendo el uso de este tipo de vehículos en desplazamientos más largos de lo habitual. Los vehículos vienen equipados con un ordenador a bordo que mantiene informada a la persona que conduce del nivel de eficiencia energética adquirida.