Toda la electricidad suministrada por la multinacional española Acciona es generada sin emitir carbono, por lo que la Comisión Nacional de la Energía (CNE) le ha conferido un nivel A en emisiones de CO2, es decir, cero emisiones. Acciona presume de que "este es un valor diferencial con respecto al resto de comercializadores, cuya producción está basada en otras fuentes como carbón, gas, o nuclear". Y es que Iberdrola, Endesa, Gas Natural Fenosa, E.On y HC Energía, es decir, las cinco grandes eléctricas –integrantes ellas de la poderosa patronal Unesa–, aparte de parques eólicos, tienen también centrales nucleares, o térmicas que queman gas o carbón y, por lo tanto, emiten CO2.
Acciona incorpora así el Museo Nacional del Prado a su cartera de clientes, en la que ya figuran una veintena de grandes empresas, como Adif, Banco Santander, Acuamed, Aena, Telefónica, Metro de Madrid, Roca, Tetrapak, Grupo Corío y APM Terminals, entre otras. A todas ellas, la compañía les suministra electricidad de origen 100% renovable, certificada por la Comisión Nacional de la Energía y en un volumen que este año superará los 3.400 millones de kilovatios hora (o GWh). La nueva línea de negocio de comercialización de energía a grandes clientes, que la compañía inició en 2005, prevé triplicar en 2012 la energía eléctrica suministrada el año anterior, cifrada en más de 1.100 GWh. La comercialización de energía verde a grandes clientes finales se enmarca en la estrategia de Acciona de ser una empresa eléctrica integrada que, además de promover, diseñar, desarrollar, operar y mantener instalaciones renovables, ofrece al cliente final "una alternativa de suministro de energía no contaminante a un precio competitivo, ampliando así la oferta en el mercado eléctrico con un servicio diferencial".
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