El acuerdo fue alcanzado tras una larga negociación entre la Comisión, el Parlamento y el Consejo europeos -el llamado trílogo- y obliga a los países a incrementar su ahorro energético un 0,8% anual durante el periodo 2021-2030, lo que "podría impulsar la renovación de edificios y el uso de tecnologías más eficientes" para la climatización, según recoge Europa Press.
Los negociaciones también alcanzaron un segundo acuerdo para establecer los mecanismos de trabajo para el proyecto de la Unión de la Energía y crear un marco en el que los Estados miembro puedan operar y cumplir con los objetivos europeos. En virtud de ello, cada Estado miembro deberá presentar cada diez años un "plan nacional integral de energía y clima", incluyendo sus objetivos nacionales, contribuciones, políticas y medidas para cada una de las cinco dimensiones de la Unión de la Energía: decarbonización, eficiencia energética, seguridad, mercado interior e investigación, innovación y competitividad. El plazo de entrega del primer plan es el 31 de diciembre de 2019.
Además, por primera vez se introduce la obligación de que los países destinen una parte de la eficiencia energética a ayudar las personas más vulnerables, caso de las afectadas por la pobreza energética.
Aplausos y críticas
El Comisario de Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, ha valorado positivamente el acuerdo sobre ahorro energético, asegurando que supone “un paso importante en la transición hacia la energía limpia”. “Europa es la mayor importadora de energías fósiles en el mundo. Hoy ponemos fin a esto", agregó en su cuenta de Twitter, según recoge EFE Verde.
También lo ve así el vicepresidente de la Comisión para la Unión de la Energía, Maros Sefcovic, quien considera que esta nueva gobernanza "reforzará la transparencia para beneficio de todos los actores e inversores, en particular. Simplificará la monitorización y notificación de las obligaciones bajo la Unión de la Energía, priorizando la calidad sobre la cantidad".
La organización conservacionista WWF, por el contrario, considera insuficiente lo ha acordado aunque celebra que “finalmente la UE está despertando ante el reto del cambio climático”, según declaró la responsable de Cambio Climático y Energía de la ONG, Imke Lübbeke. El eurodiputado húngaro Benedek Jávor, de los Verdes europeos y portavoz en materia energética, coincide con Lübbeke en que las medidas “no son suficientes para cumplir los compromisos” de París, aunque celebra que “pese a la falta de ambición de los gobiernos nacionales” se haya logrado el objetivo de reducción del 32,5%.
El eurodiputado de EQUO Florent Marcellesi considera, igualmente, que el paquete energético de la UE aún no es lo suficientemente fuerte, pero prefiere ver el vaso medio lleno: "Esta es la ruta" para hacer posible el Acuerdo de París, ha declarado. "Todos los países de la UE tendrán ahora que elaborar planes de acción nacionales, que cumplan con el objetivo del Acuerdo de París de mantener el calentamiento global por debajo de los 2 ° C, persiguiendo el 1,5 ° C. Por primera vez, anclamos en la legislación de la UE el concepto de ´presupuesto de carbono”´ y la necesidad de lograr una economía con cero emisiones de carbono tan pronto como sea posible".
El acuerdo sobre eficiencia energética se suma al ya alcanzado para fijar una cuota mínima de energías renovables en este periodo para 2030 del 32%.