La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ya avisó de que en verano los consumidores iban a recibir una mala noticia eléctrica. “Por desgracia, se ha cumplido”. Quien tenga la tarifa regulada, la de Precio Voluntario Pequeño Consumidor (PVPC), que son la gran mayoría de los españoles, ha sufrido en julio una subida en la factura de la luz del 8% (respecto al trimestre anterior).
El nuevo sistema para calcular los precios (con 24 tarifas diferentes para cada uno de los días del año) no ha conseguido rebajar lo que los españoles pagan por pulsar el interruptor.
Menos mal que sopla viento
Esta subida del 8% “podría haber sido mayor de no ser por la energía eólica, que se ha comportado excelentemente en un mes en el que no suele soplar mucho viento”, explica OCU.
El castigo al consumidor se amortigua también por las devoluciones que las eléctricas están haciendo. “Durante el primer semestre de 2014, los clientes de la PVPC pagaron demasiado por la luz y ahora se les devuelve una cantidad que ronda los 30 euros”.
Quien no tenga la tarifa regulada PVPC y se encuentre con una oferta del mercado libre, no se ve directamente afectado por esta subida.
El futuro pinta oscuro
El panorama “no es precisamente esperanzador”. En el horizonte no se adivinan bajadas para lo que queda de año. Y ahora mismo estamos en unos precios medios superiores a los de agosto de 2013. El Ministerio de Industria pronosticó que la electricidad bajaría de precio durante 2014, “pero su optimismo lo tiene crudo”.
En el gráfico que acompaña esta noticia puede verse una estimación del precio del kWh (incluyendo los peajes) y comparando los 12 meses de 2013 con los de 2014:
Y debajo el precio medio mensual del término energía en el mercado diario (€/MWh) comparando 2013 y 2014 mes a mes.