La APTP pregunta al ministro de Trabajo cómo podrán ir a trabajar muchas personas a 50 km de distancia

En su carta, la APTP recuerda al ministro que se ha prestado poca atención a "aspectos de esta reforma que tienen que ver con los derechos de movilidad de la ciudadanía y que podrían llegar a tener graves consecuencias en el plano económico y social.

Nos referimos al controvertido aspecto de penalizar económicamente a los parados que no acepten un trabajo, aunque no sea de su interés, cuando éste se encuentre radicado a una distancia de hasta 50 km del domicilio del interesado. Este punto forma parte del paquete de medidas de su Gobierno para estimular la movilidad laboral.

Para la APTP "la reforma legal promovida por el Gobierno español excluirá a mucha gente de la posibilidad real de aceptar el trabajo que se les ofrece cuando el puesto de trabajo se encuentre a una cierta distancia. Pues bien es sabido, que en nuestro país la mitad de la población no tiene carnet de conducir. Además, dos terceras partes de la población, por no tener permiso de conducir o por no tener un coche particular disponible, dependen del transporte público, de la bicicleta o del coche de un compañero de trabajo. Si a estas personas se las obligase a ir a trabajar a una distancia de hasta 50 km se cometería un acto de injusticia ya que físicamente les sería imposible hacerlo en la mayoría de recorridos. A menos que cambiasen de domicilio, con todas las repercusiones familiares que supondría".

Falta transporte público
En la carta se recuerda que moverse en transporte público dentro de Barcelona –donde la asociación tiene su sede– es sencillo, pero "cuando hay que ir a 50 km las cosas se van complicando, por la razón bien evidente de que el transporte público es más débil y de peor calidad cuanto más se aleja uno de la capital. En muchas poblaciones del área metropolitana, y muy especialmente en los polígonos industriales, el transporte público es inexistente. Si se trata de trabajos fuera del área metropolitana, encontrar un transporte público mínimamente conveniente es realmente una odisea, prácticamente imposible.

Pero para la gente que tiene coche, calculando un coste de 50 ptas/km --que es el coste real mínimo de desplazarse en coche, es decir, el coste que habría que facturar si el trabajador contase como cuenta una empresa-- y una distancia diaria de 100 km --50 km de ida y 50 de vuelta-- supondría un gasto de transporte de 661 _ al mes (110.000 ptas). El coste del transporte se comería la mayor parte de los ingresos. En ocasiones, se los comería todos. Para la gente que mueve poco el coche, cada kilómetro tiene un coste alrededor de las 100 pesetas, es decir, aún peor. Lo que sucede en Cataluña pasa agravado en toda España".

Según la APTP, "todos estos argumentos parecen razones suficientes como para pedir que el Gobierno retire este punto de la reforma del seguro de paro que se promueve ya que resulta socialmente inaceptable".

Más información:
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