Folgado presenta la Estrategia de Ahorro y Eficiencia Energética

Estos ahorros, derivados de una reducción de la intensidad energética primaria (energía necesaria por unidad de PIB) en 2012 con respecto a 2004 del 7,2%, serán consecuencia tanto del propio desarrollo tecnológico e iniciativas de los sectores como de las medidas impulsadas desde las Administraciones para fomentar el ahorro energético, de acuerdo con Folgado. La energía primaria incluye la energía final, más la energía empleada en los procesos de transformación, incluyendo las pérdidas en transporte y distribución.

Esta iniciativa, junto con la planificación de redes, la metodología de tarifas, el Plan de Fomento de las Energías Renovables y la liberalización del gas y la electricidad de enero de este año, trata de asegurar la oferta de energía en España para atender una demanda creciente, fruto del crecimiento económico previsto para los próximos años, añadió el secretario de Estado

A su vez, persigue hacer compatible este crecimiento económico con un desarrollo energético sostenible, reduciendo las emisiones de CO2, potenciando las energías limpias e impulsando la diversificación de las fuentes energéticas, en un entorno marcado por la seguridad energética y la calidad de suministro.

La Estrategia de Ahorro y Eficiencia Energética 2004-2012 analiza la evolución de los diversos sectores productivos desde el punto de vista de su consumo de energía e identifica las medidas a poner en marcha en los próximos años para que España pueda reducir su consumo de energía por unidad de producto, es decir, consumir menos energía para producir lo mismo. Se estima que con una reducción de la intensidad energética del 7,2%, el consumo de energía se reducirá del 3,5% al 2,8% de crecimiento anual hasta 2012, para un crecimiento del PIB del 3% de media durante dicho período.

Análisis sectorial
La Estrategia analiza los sectores de Industria (desagregado en 11 subsectores), Transporte, Edificación, Equipamiento Residencial y Ofimática, Servicios Públicos; Transformación de la Energía y Agricultura. Para cada uno de estos sectores se plantean objetivos; se describen las medidas propuestas y se definen los instrumentos que es preciso aplicar, cuantificando costes y ahorros energéticos derivados.

En conjunto, la Estrategia propone la adopción de un total de 186 medidas, agrupadas en 10 tipos y dirigidas a cada uno de los 7 sectores. Del total de medidas, 107 van dirigidas a la industria; 20 al transporte; 27 a transformación de la energía; 12 a edificación y las 20 restantes a otros sectores.

Se estima un coste global de inversión asociada a las medidas previstas de unos 25.993 millones de euros para el conjunto del período. De este coste, unos 1.895 millones de euros corresponderían a apoyos públicos de las distintas Administraciones y el resto, 24.098 millones, a la inversión privada asociada a las medidas previstas.

Las medidas planteadas supondrán un ahorro de energía en 2012 de 15.574 ktep (kilotoneladas equivalentes de petróleo), lo que representa una reducción del 8,6% respecto al escenario tendencial en ausencia de la Estrategia. El ahorro de energía primaria acumulado en el periodo será de 69.950 ktep y el CO2 no emitido se elevará a 190 millones de toneladas. El ahorro anual de energía consolidado a partir de dicha fecha se estima en 2.862 millones de euros, mientras que las emisiones de gases de efecto invernadero evitadas ascenderán a 42 millones de toneladas al año.

El documento será remitido para su análisis a la Comunidades Autónomas, asociaciones empresariales y a los agentes sociales, para ser enviado a finales de septiembre a la Comisión de Economía del Congreso, tras ser aprobado por el Consejo de Ministros.

Más información:
www.idae.es

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