EnerAgen acaba de publicar "un exhaustivo análisis del nuevo Plan". En él, las agencias españolas de energía integrantes de la asociación plantean una serie de consideraciones y propuestas que consideran "imprescindibles para la consecución de los objetivos establecidos y para garantizar una aplicación eficiente de las medidas". La asociación se muestra muy crítica con diversos aspectos del plan que ha enviado a Bruselas el Gobierno. A continuación, extractamos algunas de esas críticas [Abajo incluimos un enlace directo al documento de posicionamiento de EnerAgen].
La Asociación de Agencias Españolas de Gestión de la Energía observa con preocupación -explica Eneragen en su documento- que "las pocas medidas propuestas que son diferentes a las derivadas de las obligaciones adicionales de ahorro energético sigan siendo medidas en sectores que se caracterizan por ratios económico-energéticos (dotación presupuestaria pública en euros por tonelada equivalente de petróleo [€/tep] de ahorro energético acumulado) elevados". El documento de análisis que ha publicado la asociación muestra, "a modo de ejemplo, cómo los programas PIVE presentan un ratio de 4.000 €/tep en comparación con medidas en otros sectores como el industrial, con un ratio de 100 €/tep o el de la edificación, con 1.000 €/tep". En la misma línea, EnerAgen pone de manifiesto en su análisis cómo el ratio obtenido en el marco de la colaboración entre el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía) y las comunidades autónomas constituye el 12% del ratio de los planes PIVE. En este sentido, EnerAgen solicita que, "por racionalidad presupuestaria y óptima orientación de los fondos públicos, estos se asignen en mayor grado a aquellos ámbitos que ofrezcan ratios económico/energético más favorables".
Preocupación por el papel que desempeñarán las comercializadoras
EnerAgen también expresa en su documento de posicionamiento una cierta preocupación por el papel que pueden desempeñar en el futuro inmediato -en materia de ahorro y eficiencia- las empresas comercializadoras, cuyo objetivo es, lógicamente, vender kilovatios (no ahorrarlos). "La delegación de una buena parte de la ejecución de los objetivos de eficiencia energética en las empresas comercializadoras -dice explícitamente la asociación- perjudica el equilibrio territorial y sectorial del Plan de Acción. Los criterios meramente económicos y comerciales que lógicamente rigen las actuaciones de estas empresas -añade- no garantizan una gestión eficiente de las medidas en base a las prioridades de la política energética del gobierno, ni la presencia de un elemento vertebrador y equilibrado en base a variables territoriales o sectoriales. Esto podría derivar en una gestión que favorezca la aplicación de las medidas que ofrezcan una mayor rentabilidad, favoreciendo la adopción de medidas de baja calidad tecnológica, con especial incidencia negativa en sectores difusos y, por el contrario, un apoyo a aquellos sectores donde podría no ser tan necesario".
Cuidado con las trampas: muchas ESEs pertenecen a las comercializadoras
EnerAgen considera por otra parte "acertado el relevante papel que se otorga a las empresas de servicios energéticos". Sin embargo -matiza la asociación-, "considera imprescindible que se produzcan cambios normativos que permitan afrontar las barreras todavía existentes en la actualidad, tanto de tipo financiero como administrativo, proponiendo para ello, que se regulen los contratos de servicios energéticos en el sector público, de forma que computen como un servicio más y no como endeudamiento". Por otro lado, la asociación advierte en su análisis de la "distorsión que puede ocasionar el hecho de que las empresas comercializadoras puedan delegar sus obligaciones de eficiencia energética en las empresas proveedoras de servicios energéticos, recordando que muchas de estas empresas pertenecen precisamente al mismo grupo empresarial que las comercializadoras, a las que se ofrecería, por tanto, una doble vía para actuar. Es necesario que el procedimiento de control evite estas posibles duplicidades".
Las agencias son muy buenas, pero no vamos a tenerlas en cuenta
Eso es lo que parece venir a decir el plan del Gobierno, según Eneragen. Así, la asociación muestra su "satisfacción por las múltiples referencias que se realizan a los buenos resultados obtenidos de la colaboración entre el IDAE y las agencias de energía de las Comunidades Autónomas, en el desarrollo de la anterior estrategia". No obstante, la asociación expresa, "entre otras preocupaciones, la relativa a la ausencia de herramientas regionales en la ejecución del nuevo Plan, poniendo de manifiesto la dificultad de comprender el cambio de modelo de gestión propuesto, un modelo que, tal y como reconoce el propio Plan, ha dado excelentes resultados en su alcance y ejecución". EnerAgen recuerda, a este respecto, que las agencias ya disponen de personal altamente cualificado, competitivo, capacitado y experimentado para llevar a término las actuaciones del Plan: "su participación [la participación de las agencias de EnerAgen], tanto en la elaboración y desarrollo del Plan, como en la implementación de las medidas propuestas es fundamental para evitar desequilibrios, ineficiencias y sobrecostes indeseados que podrían derivarse de una aplicación centralizada".
¿Duplicando gestores?
Además -añade la asociación-, "y en el actual marco de racionalización de la administración pública y reducción del gasto público, objetivos que EnerAgen comparte, se insiste desde la asociación en que prescindir de la colaboración de las agencias de energía en la ejecución del Plan inevitablemente acabará generando mayores costes a los contribuyentes, por la duplicación de funciones y la contratación de asistencias técnicas externas". Finalmente, y a este respecto, EnerAgen recuerda el marco legal definido por los Estatutos de Autonomía, según el cual, "las medidas deben canalizarse adecuadamente a través de las administraciones competentes, en aras a evitar duplicidades, ineficiencias y, particularmente, a garantizar la adopción de las medidas en proximidad al ciudadano y al territorio".
Que quede claro cuánto debe ahorrar cada quién
Por fin, EnerAgen pone de manifiesto en el documento "la necesidad de definir claramente la conexión y complementariedad existente en relación con las medidas, presupuestos, fuentes de financiación, indicadores, agentes a intervenir y metodología de ejecución existente entre el nuevo plan de acción y el anterior 2º Plan de Acción Nacional de Eficiencia Energética de España 2011-2020". En la misma línea, la Asociación solicita "que se clarifique la contribución individual de cada una de las medidas propuestas al objetivo final de ahorro, que se establece en un 26,4%, así como la distribución presupuestaria entre ellas, al objeto de poder valorar eficazmente la viabilidad en la consecución del objetivo global propuesto".
Señas de identidad
La Asociación de Agencias Españolas de Gestión de la Energía, EnerAgen, es la asociación, creada en el año 2003 a instancias de la Comisión Europea, "que aglutina los intereses comunes de las agencias españolas de gestión de la energía, cubriendo los diferentes ámbitos de actuación, al objeto de mejorar el trabajo de todas, promover el intercambio de información y buenas prácticas, así como promover, asegurar y fortalecer el papel de las agencias, disponiendo de una voz única que las represente, tanto en el ámbito nacional como en foros internacionales". La asociación está, por tanto, al servicio de todas las agencias de energía, y su estructura ha sido diseñada para ayudar a promover y fortalecer las actividades y actuaciones de todos sus miembros.