Una auditoría llevada a cabo por el Instituto Enerxético de Galicia –organismo dependiente de la consejería de Economía e Industria de la Xunta– concluye que "la puesta en marca de medidas de ahorro y eficiencia energética en empresas del sector textil gallego permitiría consumir un 20% menos de energía y reducir un 25% el gasto económico en energía". El instituto gallego (Inega) auditó diecisiete empresas gallegas que gastan por término medio 64,60 toneladas equivalentes de petróleo de energía, unos 81.500 euros, alrededor de un 2,2% de su facturación.
Las industrias fueron seleccionadas por su representatividad, tanto por sus dimensiones como por los campos de actuación. Según el Inega, las principales medidas para reducir el gasto en estas empresas del textil gallego serían la substitución de lámparas por otras más eficientes (se logran así ahorros de hasta un 80%), un adecuado control de los sistemas de climatización (consiguiéndose ahorros de hasta el 30%, según el Inega) y la introducción de mejoras en los aislamientos y cerramientos, medida que el instituto señala puede añadir "un ahorro potencial máximo del 35%".
Según este estudio, el gasto de energía supone el 15,5% de cada prenda elaborada, siendo la energía más costosa la electricidad, seguida del combustible para el transporte (gasóleo) y, por último, el gas natural. La electricidad es la energía que más se consume, ya que supone casi la mitad del consumo total del textil, debido principalmente a la demanda de la maquinaria. Como conclusión, el estudio del Inega señala que con la introducción de las mejoras señaladas es posible ahorrar un 20% de energía y un 25% en gasto, ahorro que se traduciría en algo más de 20.000 euros anuales de media.