En España se recicla más acero que la suma de todos los demás materiales juntos. Prácticamente el 100%, según informa Unesid, la asociación empresarial de la siderurgia española. Este reciclaje conlleva unos innegables beneficios ambientales y económicos, en un ciclo respetuoso con el medioambiente. Por cada tonelada de acero que recicla la industria siderúrgica se ahorra cerca de una tonelada y media de mineral hierro, un 85% de agua, un 80% de energía y un 95% de carbón y todas sus correspondientes emisiones asociadas. La siderurgia española ha reducido más del 40% sus emisiones en las 2 últimas décadas.
Además, en el proceso de reciclado de acero a partir de chatarra férrica (consumo de chatarra para fabricación de acero), prácticamente no se produce merma de material, el rendimiento es casi del 100%. Ningún otro material, salvo los metales nobles, muestra un rendimiento similar.
De este modo, al final de su vida útil, un producto de acero se transforma en parte de un automóvil, una viga de un edificio, una lavadora, de un aerogenerador… sin perder ni un ápice de su calidad y de sus propiedades iniciales. El acero se puede reciclar una y otra vez, indefinidamente, hasta tal punto que hoy se sigue reciclando acero fabricado hace más de 150 años. La industria siderúrgica culmina el ciclo, reciclando la chatarra recolectada y fabricando con ella acero, que se utilizará en nuevos productos.
Fácil de separar
Las propiedades magnéticas el acero hacen que sea fácilmente separable de otros residuos mediante imanes. Las vías de recolección de este material pasan por la recogida a pie de calle, la separación por imanes en vertederos o bien en los centros de transferencia y las recogidas selectivas.
De acuerdo con los datos aportados por Unesid, la producción de acero en España el año pasado fue de 14,2 millones de toneladas, con un consumo nacional de 10,4 millones de toneladas. La industria siderúrgica española supone aproximadamente el 4,6% del PIB industrial. Se trata de un sector netamente exportador (69% del total de la producción), alcanzando el 3,5% de las exportaciones españolas de bienes.
Además, según la misma fuente, la industria siderúrgica española invierte 7 euros en medioambiente por cada tonelada que produce, y realiza un uso eficiente de los recursos hasta aprovechar casi el 80% de los residuos y subproductos que genera en el proceso.
Unesid aglutina 46 empresas, que emplean a 60.000 personas –además de las 20.000 que intervienen en la recolección de chatarra- y facturan en su conjunto unos 13.000 millones de euros.