La constructora anunció ayer que acaba de emprender la ejecución de un nuevo proyecto de 92 viviendas para Solvia, la inmobiliaria de Banco Sabadell. El proyecto cumple las condiciones para obtener el certificado de construcción sostenible Breeam Very Good y la calificación energética A. Además -informa Inbisa-, "se anticipa a la futura normativa que obligará a que, al término de 2020, todos los edificios que se construyan en la Unión Europea tengan consumo de energía casi nulo".
La Directiva Comunitaria de Eficiencia Energética de los Edificios (2010/31/EC) indica que, en el caso de edificios públicos, esa condición de bajo consumo energético, denominada internacionalmente nZEB (Nearly Zero Energy Buildings), deberá cumplirse necesariamente a partir del 31 de diciembre de 2018. A escala nacional -explican desde Inbisa-, España está en un proceso de adaptación de la normativa a dicha directiva que se culminará con la modificación del Código Técnico de la Edificación prevista para finales del año próximo. El edificio promovido por Solvia, y que ya está construyendo Inbisa, "se anticipa a esta normativa de ahorro energético asegurando unos patrones holgadamente más estrictos que los que, previsiblemente se materializarán en la futura ley de carácter estatal".
Breeam Very Good
Adicionalmente, la obra está formulada para contar con el certificado de construcción sostenible Breeam Very Good, que ya ha sido concedido a diferentes proyectos realizados por Inbisa Construcción y que va más allá de criterios de ahorro energético, de manera que garantiza un completo abanico de características medioambientales de carácter global, desde la selección responsable de los materiales hasta la sostenibilidad de los procesos de construcción. "Entre las características constructivas que hacen posible el ambicioso objetivo energético -informa Inbisa-, están la instalación de aislamientos especiales y la producción de calor y frío mediante geotermia y aerotermia, es decir, extrayendo el calor producido de forma natural por el núcleo terrestre y el aire que rodea al edificio".
Más de nueve millones de euros
El edificio residencial, cuyo presupuesto está por encima de los nueve millones de euros, se desarrollará en un plazo de 18 meses y resultará en un conjunto de diseño contemporáneo con viviendas de dos a cuatro dormitorios. Está ubicado en una de las zonas de mayor crecimiento urbanístico de la Comunidad de Madrid y tendrá una superficie total construida de más de 10.700 metros cuadrados (m²), más 4.500 m² bajo rasante distribuidos en dos plantas de garajes. Además, la urbanización contará con piscina, zonas ajardinadas, zona infantil, trasteros y garajes. La obra ha sido proyectada por los arquitectos RLA César Ruíz-Larrea Cangas, Antonio Gómez Gutiérrez y Gorka Álvarez Ugalde.