Making-city se desarrollará a lo largo de los próximos 60 meses y contará con un presupuesto de 20 millones de euros. Reúne a 34 socios de nueve países y está coordinado por el Centro Tecnológico CARTIF. En el consorcio participan actores clave dentro de la cadena de valor de las ciudades inteligentes: entidades académicas y de investigación, grandes compañías, pymes, organismos públicos y asociaciones que, como GBCe son expertas en edificación sostenible.
El proyecto involucra dos “ciudades faro”, Groningen (Holanda) y Oulu (Finlandia), para la demostración de sus objetivos. Ambas ciudades han sido elegidas debido a su trabajo actual y su compromiso con la transición energética, y el trabajo que en ellas se realice ayudará las seis ciudades seguidoras”: León en España, Bassano del Grappa (Italia), Kadiköy (Turquía), Poprad (Eslovaquia), Vidin (Bulgaria) y Lublin (Polonia), para replicar las soluciones propuestas.
Making-city va a ser, por tanto, un proyecto demostrativo a gran escala orientado hacia el desarrollo de nuevas estrategias integradas para acometer la transformación del sistema energético urbano hacia ciudades bajas en carbono. Para ello contará con el enfoque de los Distritos de Balance Energético Positivo (PED) como pieza clave en este recorrido.
El proyecto desarrollará procedimientos avanzados y metodologías basadas en los barrios de energía positiva: un Distrito de Energía Positiva es un distrito con una importación de energía neta anual nula y emisiones de CO2 netas también nulas, trabajando para lograr un excedente local anual de producción de energía renovable.
En 2016, el informe "Fecha límite 2020" indicó que las ciudades por si solas pueden reducir el 5% de las emisiones mundiales, contribuyendo al cumplimiento del Acuerdo de París. Junto con otras administraciones y empresas y en concierto con otros niveles del gobierno y el sector privado, pueden potencialmente contribuir a la reducción del 46% de las emisiones.
Desde Green Builiding España señalan que "las actividades y los resultados realizados en el proyecto beneficiarán a muchas ciudades, teniendo en cuenta que casi 9.000 ya se han comprometido públicamente a participar en el Pacto Mundial de Alcaldes por el Clima y la Energía. Esta coalición internacional de ciudades y gobiernos locales comparten la misma visión de acción a largo plazo para combatir el cambio climático y avanzar hacia una sociedad con bajas emisiones y resilientes".