El proyecto ha sido impulsado desde el Intia, que es una empresa pública navarra. "Para acometerlo -informa el Instituto-, la Administración navarra ha realizado un gran esfuerzo inversor, en el que han colaborado Bruselas y su Banco Europeo de Inversiones, que ha asumido una parte de la financiación del proyecto". El nuevo sistema opera desde el 15 de julio. Desde esa fecha, la balsa que abastece al regadío de El Raso y Las Suertes de Funes se está llenando por presión natural a través del llamado Ramal Arga, que transporta, sin necesidad de bombeos, aguas provenientes del Canal de Navarra. "Hasta ahora -informa el Intia-, era una estación de bombeo la que salvaba los 200 metros de elevación desde la confluencia de los ríos Arga y Aragón hasta el monte donde se localiza la zona regada, gastando cada año más de 3,5 millones de kilovatios hora, que equivalen a unas 767 toneladas de CO2".
Según el Ejecutivo foral, "la alta rentabilidad de los cultivos que se producen en las 802 hectáreas del regadío es lo que ha permitido a los agricultores de la zona ir pagando, durante los últimos 17 años, la cuantiosa factura eléctrica que se generaba". Ahora -explican desde el Intia-, "los agricultores usuarios del regadío de El Raso y Las Suertes de Funes han comprobado con satisfacción cómo la conexión al Canal de Navarra les va a permitir deshacerse de una factura eléctrica anual de unos 450.000 € (en concreto en 2017 fue de 461.345,94 € y en 2018 de 439.133,63 €)". Los cultivos son, en orden de magnitud, brócoli, espinacas, guisante, maíz grano, maíz dulce, tomate, patata, trigos, pimientos, habas, cebada, pasto, viña, cerezos, espárragos, alubias verdes, zanahorias, pacharán, coliflor, perales y calabacín.
Instituto Navarro para la Transferencia e Innovación en el sector Agroalimentario (Intia)