El Ejecutivo castellano-manchego ha comunicado oficialmente que ha renovado con Cruz Roja el acuerdo que mantienen ambas partes "para desarrollar en 2017 el Plan contra la Pobreza Energética, destinado a ayudar a las personas que se encuentran en una situación de pobreza severa y no pueden hacer frente al coste del suministro energético". El vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, ha señalado que el Consejo de Gobierno ha aprobado en su reunión de esta semana la prórroga de este acuerdo, "que ha dado muy buenos resultados en 2016".
Ayudas económicas directas
Martínez Guijarro ha explicado que Cruz Roja Española gestionará la concesión de ayudas económicas directas a quienes se encuentren en situación de pobreza energética a través de este plan, "que llegará a unas 7.000 familias de la región, con menores de entre 0 y 16 años, y que tengan abierta una historia social en los Servicios Sociales de Atención Primaria". El Plan se llevará a cabo -informa el gobierno regional- entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2017 "y consistirá en una ayuda de 150 euros por familia, que será prescrita por los Servicios Sociales de Atención Primaria".