Los proyectos seleccionados -informa la Generalitat- se subvencionarán con ayudas de hasta el 30% del coste elegible (aunque esta cantidad puede incrementarse en 10 puntos en el caso de pequeñas y medianas empresas) y abarcan desde la sustitución de equipos e instalaciones por otros de alta eficiencia energética a la recuperación de los calores residuales o la mejora del rendimiento de los equipos existentes. También se han concedido ayudas económicas a aquellas iniciativas que contemplan la implantación de sistemas de control y seguimiento de los consumos energéticos y la mejora de la eficiencia energética de la iluminación de las fábricas.
Así mismo, el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) también apoyará las acciones que supongan al menos un 30% de ahorro energético en la iluminación mediante medidas como la sustitución de luminarias, la implantación de sistemas de regulación de encendido y apagado, detectores de presencia, etc.
La factura energética
Por otra parte, el programa de eficiencia energética en la edificación apoya las acciones que redundan en una mayor eficiencia energética en las instalaciones térmicas cuando estas conlleven una disminución de al menos el 20% del consumo energético, para lo cual se subvencionará el cambio de calderas, la instalación de máquinas de absorción/ adsorción que aprovechen calores residuales, sistemas centralizados de climatización de refrigeración y calefacción o la implantación de sistemas de control y regulación de los equipos.
Estas líneas de incentivos cuentan con la cofinanciación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en un porcentaje del 50%, a través del Programa Operativo Feder de la Comunitat Valenciana, vigente para el periodo 2014-2020, dentro del Eje Prioritario 4 (Favorecer el paso a una economía baja en carbono en todos los sectores).
El sector industrial -informa la Generalitat- representa el 30% del consumo total de energía de la Comunitat. Según el Gobierno regional, se da la circunstancia, además, de que "el elevado coste económico de la energía supone que actualmente el segundo o incluso el primer lugar en la estructura de costes de determinados sectores la ocupe la factura energética, con lo que la gestión eficiente de la energía es un elemento clave e indispensable para las empresas".