Todos los países reunidos en la Cumbre del Clima de Dubai (COP28) han aprobado esta misma mañana el nuevo borrador que presentaba la presidencia en el que propone a los países una "transición" para abandonar los combustibles fósiles para 2050, y que marca la primera vez que se abordan los combustibles fósiles en las conferencias internacionales sobre el clima. El documento, de 21 páginas, ahora sí que incluye el objetivo de triplicar la capacidad de las energías renovables de aquí a 2030 y duplicar el ritmo de eficiencia energética durante este periodo (en el borrador del lunes no se mencionan como objetivos, sino sólo como una posible medida); así como acelerar los esfuerzos para reducir progresivamente el uso "incesante" de la energía de carbón y para dirigirse hacia sistemas energéticos con emisiones netas cero.
El borrador recoge también reducir sustancialmente las emisiones distintas de dióxido de carbono a nivel mundial, incluida las emisiones de metano, para 2030; eliminar gradualmente los subsidios ineficientes a combustibles fósiles; y acelerar la reducción de emisiones del transporte por carretera. El plan acordado pasa por mantener al alcance el objetivo de 1,5 grados centígrados y se refiere al objetivo acordado internacionalmente en París en 2015 de limitar el calentamiento global a 1,5 grados en comparación con la época preindustrial. Muchos expertos en clima y ecologistas ya lo habían puesto en duda.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera: "tenemos que dejar atrás los combustibles fósiles. Hay muchas referencias muy relevantes sobre cómo hacerlo y está sentando las bases de una nueva etapa. Tenemos un texto que reconoce cuestiones de muchas partes del mundo, pero que reconoce nuestra huella, la de la Unión Europea, basada en principios, en solidaridad, en unidad de acción para la salida de los combustibles fósiles en la vía de asegurar acceso a la energía para todos"
La presidenta de la Comisión Europea Úrsula von der Leyen: "Una parte crucial de este acuerdo se hace verdaderamente en Europa. El mundo entero respaldó nuestros objetivos para 2030: triplicar la energía renovable y duplicar la eficiencia energética, ambos para 2030. El acuerdo de hoy marca el comienzo de la era posfósil"