La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, tiene la "impresión" de que la XVII Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático que se celebra en Sharm-El Sheikh (Egipto) y que en principio terminaba este viernes, se prolongará probablemente hasta el domingo, lo que en su opinión demuestra que los negociadores quieren alcanzar un acuerdo "eficaz". "Tengo la impresión de que por lo menos mañana vamos a seguir aquí y que más bien será la noche del sábado al domingo", ha aventurado en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press.
Si bien, ha añadido que la COP27 incluso podrían terminar antes en parte por el movimiento realizado este viernes por la UE relativo a financiación, al que considera "muy positivo" para desbloquear la situación. "Si llegamos a resolver este asunto esta tarde, esta noche, esta madrugada, pero quedan temas complejos y sensibles", ha comentado. En todo caso, considera que alargar la duración prevista de la cumbre es la consecuencia de que todos están "convencidos" de que quieren ser "eficaces" en las decisiones. "Para llegar a una declaración tibia o para no resolver nada no haría falta alargar esta reunión", reflexiona.
Los acuerdos que están por llegar
Respecto a las dificultades actuales en la negociación para alcanzar un acuerdo unánime de las partes, la vicepresidenta ha explicado que hay tres frentes abiertos "importantísimos" y de una "gran sensibilidad geopolítica" desde el punto de vista de la "actuación". La primera es el escollo de reducir las emisiones "lo más rápidamente posible" porque cuanto más se mitiguen, menos necesidad habrá de adaptación. Además, en cualquier caso habrá que adaptarse por lo que cuanto más se acometa de manera anticipada menos pérdidas y daños irreparables habrá pero aún así quedarán los daños y pérdidas para los más vulnerables.
"El punto crítico es cómo respondemos rápidamente ante las pérdidas y daños reduciendo emisiones de forma muy importante no solamente los países desarrollados, también los grandes emisores en desarrollo, incrementando las fuentes de financiación y haciendo a fácil el acceso a esas fuentes de financiación", ha subrayado. En ese sentido, no cree que baste con transferir recursos públicos sino que adelanta que habrá que pensar en "mecanismos innovadores" como la propuesta lanzada por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, que plantea implantar un impuesto o tasa global sobre el petróleo, o el mecanismo del Fondo Monetario Internacional para crear un fondo alimentado por derechos especiales de giro para que puedan beneficiarse los países más vulnerables.
Por otro lado, ha señalado que la crisis energética global genera razones adicionales de "muchísimo peso" tanto económicas como sociales para acelerar la transición y cambiar el modelo energético. Así, ha explicado no es sencillo salir de la "adicción a los combustibles fósiles" en un contexto de alta vulnerabilidad, volatilidad y toda la distorsión que genera una dependencia tan alta de estos. "Absorber un shock tan importante como quedarnos de un día para el otro con un cuarenta por cien menos de gas natural en Europa no es fácil. Necesita un proceso acelerado, pero un proceso", ha admitido.
Por ello, justifica como "normal" que muchos países europeos hayan tenido que reclamar flexibilidad para poder garantizar su seguridad energética y que para ello hayan tenido que recurrir en el corto plazo a combustibles incluido el carbón. "Esto no nos desvía de nuestro objetivo. El compromiso ha sido claro y ha sido unánime", ha garantizado la vicepresidenta que ha destacado los "pasos de gigante" de las últimas semanas en el conjunto europeo para contar con todas las normas que permita reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55 por ciento en 2030.