El Informe especial del IPCC sobre el calentamiento global, publicado en octubre de 2018, señala que los impactos de permitir que el calentamiento global alcance los 2 °C por encima de los niveles preindustriales son mucho mayores y más catastróficos que 1,5 °C. Un incremento de temperatura que se podría superar ya en 2040. Para evitarlo, el informe del IPCC afirma que se requiere una transformación radical y urgente de todos los sistemas económicos a una escala sin precedentes. Esto implica avances inmediatos hacia sistemas de energía, transporte y medio ambiente construidos sin carbono, y un sistema terrestre que pueda alimentar al planeta mientras protege los ecosistemas vitales y elimina la presión de los hábitats salvajes y la biodiversidad.
Lejos de considerar inasumible este ambiciosos objetivo, el WBCSD asegura que "esta transición a un futuro resiliente y sin emisiones de carbono puede generar enormes beneficios para nuestras economías, la sociedad y la naturaleza". Así, el Consejo y sus empresas miembro piden a los gobiernos que adopten compromisos alineados con 1,5 grados y emisiones globales netas cero para 2050, mediante medidas de gran alcance para poner un precio al carbono, garantizar una transición justa y crear resiliencia a los impactos del cambio climático.
Estas son las expectativas de los integrantes del WBCSD ante la COP25:
• Aumento de la ambición hacia 1,5 °C y una economía global neta cero. "Instamos encarecidamente a los países a que fortalezcan su acción climática y aumenten sus compromisos nacionales para asegurar emisiones netas cero globales lo antes posible y crear sociedades resilientes al clima. Las economías desarrolladas, cuyo liderazgo es esencial, deben establecer planes para lograr esto para 2050 a más tardar", señalan. Así piden a los gobiernos que anuncien claramente su intención de fortalecer las metas a 2025 y 2030 de las contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC), y desarrollar o actualizar sus estrategias de bajas emisiones de gases de efecto invernadero a largo plazo, compatibles con una vía de 1,5 °C.
• Trabajo conjunto. Piden a las empresas y a los gobiernos líderes, "trabajar juntos para crear lazos de ambición climática que se refuercen positivamente con políticas gubernamentales ambiciosas y fuertes que den claridad y confianza a las empresas para invertir decisivamente en productos, servicios y soluciones con cero emisiones de carbono". Estos bucles de ambición "aceleran la transición a un mundo sin carbono", aseguran.
• Precio del carbono. Los integrantes del WBCSD consideran que los mecanismos de fijación de precios del carbono son críticos para respaldar los esfuerzos necesarios para impulsar la transición hacia un futuro con bajas emisiones de carbono y lograr el objetivo de 1,5 °C. Afirman que son un medio de bajo coste para lograr reducciones profundas de emisiones al tiempo que mantienen la competitividad, crean empleos, fomentan la innovación, permiten la inversión, crean valor para las soluciones y minimizan los costes sociales. Además, "corrigen los problemas actuales al aplicar el principio de quien contamina paga para abordar el cambio climático, internalizando así los costes de la contaminación por carbono en los precios".
• Resiliencia. Aunque las compañías del WBCSD creen que aumentar la ambición de mitigación es fundamental para contener el calentamiento global a 1,5 °C, añaden que "debemos desarrollar resiliencia a los impactos climáticos que no podemos evitar" e integrar estas estrategias en prácticas de gestión de riesgos, planes de continuidad comercial y planes de crecimiento e inversión.
• Financiación. Para lograr una transición acelerada hacia una economía con cero emisiones de carbono, "los mercados necesitan información completa sobre los riesgos y oportunidades climáticas, y señales y políticas de precios claras para permitir que los flujos financieros globales cambien urgentemente hacia inversiones en innovación y tecnología destinadas a lograr una economía neta cero tan pronto como sea posible", aseguran.
• Transición justa. Piden, asimismo, a los gobiernos que apoyen una transición justa en toda la economía a emisiones netas cero "a través de facilitar el diálogo social con empresas, trabajadores y comunidades para garantizar que los trabajos decentes cumplan con altos estándares laborales, e integrando las medidas descritas en la Declaración de Silesia de Solidaridad y Transición Justa en los NDC y planes nacionales de clima y energía".
• Naturaleza. Nuestros bosques, praderas y humedales pueden secuestrar y almacenar carbono "proporcionando una oportunidad única para ayudar al calentamiento global a mantenerse dentro del límite de 1,5 °C", afirman desde el Consejo. Pero añaden que "los esfuerzos para abordar estos problemas aún están fragmentados. Hay una falta de urgencia y necesidad de formulación de políticas más coordinada y coherente".
Entre las casi doscientas grandes compañías que integran el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible se encuentran Acciona, Apple, Basf, Danone, Deloitte, EDF, Engie, Google, Ikea, Microsoft, Mitsubishi, Pepsico, Philips, Saint Gobain, Santander, Schneider, Walmart...