El 14 de octubre de 2015 la Comisión Europea lanzaba la convocatoria para participar en BEcool a través de la línea Societal Challenges del Programa H2020 y dentro de la temática Secure, clean and efficient energy (Competitive Low-Carbon Energy). Un año después, el 8 de septiembre de 2016, se cerró dicha convocatoria, y ahora el Ceder/Ciemat da a conocer su puesta en marcha y su participación en el proyecto, cuyo objetivo principal es “reforzar la cooperación entre la Unión Europea y Brasil para desarrollar cadenas de valor de biocombustibles avanzados de forma coordinada”.
El proyecto busca cubrir toda la cadena de valor de los biocarburantes: producción de biomasa, logística, conversión y explotación. Desde el Ceder/Ciemat aseguran que “además de mejorar la logística, el establecimiento de los sistemas de cultivo innovadores de BEcool permitirá aumentar la materia prima de biomasa al menos un 50% sin afectar negativamente a la producción de alimentos, la calidad del suelo o los usos habituales de la tierra”.
Búsqueda de la eficiencia a través de la gasificación
En la convocatoria lanzada por H2020 se exponen como objetivos específicos la gasificación del bagazo (subproducto de varios cultivos) para producir gas de síntesis y biocarburantes, incluidos los destinados a la aviación; nuevas investigaciones aplicadas a la logística de la producción de biomasa y a la diversificación de materias primas; y desarrollar nuevas tecnologías de fermentación y separación para biocarburantes avanzados y para aumentar la eficiencia energética de los procesos”.
Según la información del Ceder/Ciemat, “la mejora en la eficiencia del proceso de gasificación de las nuevas materias primas permitirá obtener gas de óptima calidad a partir de fuentes no convencionales, como cultivos lignocelulósicos y residuos”. La convocatoria es tajante en cuanto a la materia prima con la que trabajar: “se excluyen los biocarburantes producidos a partir de fracciones de almidón, azúcar y aceites procedentes de cultivos alimentarios”.
Mejoras también en el pre-tratamiento, hidrolisis y procesos de sacarificación
Desde el Ceder/Ciemat añaden que el proceso de gasificación “posibilitará superar una de las principales barreras relacionadas con la logística de la materia prima de baja densidad energética y mejorar drásticamente la valorización de los residuos ricos en lignina, beneficiando la eficiencia energética de toda la cadena de valor”. “Además –apostillan–, los avances tecnológicos en el pre-tratamiento, hidrolisis y los procesos de sacarificación enzimática y fermentación aumentarán la competitividad del etanol bioquímico”.
El centro español, que participa en BEcool con su Unidad de Biomasa, aportará sus conocimientos en materias primas lignocelulósicas y logística sostenible, caracterización de la biomasa y de procesos de conversión térmica y evaluación de recursos sostenibles para producción de biocarburantes.
Ceder con residuos agrícolas y forestales y Senasa con biocarburantes para la aviación
La experiencia y participación del Ceder/Ciemat en otros proyectos europeos centrados en la eficiencia del aprovechamiento energético de biomasas residuales, como EnerbioScrub y Biomasud Plus, permitirá adquirir mayor protagonismo en BEcool. En concreto, facilitará varias hectáreas de terreno cultivable, proveerá datos georeferenciales sobre biomasa sostenible procedente de residuos agrícolas o forestales de países del sur de Europa y llevará a cabo la experimentación con cultivos anuales y perennes en España.
BEcool cuenta con un presupuesto cercano a los cinco millones de euros, de los que 209.960 corresponden al Ceder/Ciemat, y tiene una duración de cuatro años. El consorcio internacional, cuyo socio coordinador es la Universidad de Bolonia (Italia), está formado por catorce organismos de siete países de la UE, entre los que destacan tres universidades y ocho centros de investigación.
El otro socio español es Senasa (Servicios y Estudios para la Navegación Aérea y la Seguridad Aeronáutica), que también aporta su experiencia en el campo de los biocarburantes para la aviación, tanto a escala europea, en el proyecto Itaka, como en España, con su participación en el mayor acuerdo alcanzado en este sector.