Primero fue la celulosa, luego la biomasa, después la termosolar y ahora se une la solar fotovoltaica. La evolución de Ence hacia las energías renovables es imparable, como lo demuestra el anuncio de los 330 MW que pretende instalar en Andalucía. Los seis proyectos destinados a esta comunidad autónoma lo consideran parte de un “decidido compromiso con la necesaria descarbonización del modelo energético nacional”.
Afirman que los seis proyectos cuentan con el informe de viabilidad de acceso de Red Eléctrica de España y “se encuentran en distintos grados de maduración y avanzan conforme a lo previsto en las fases de tramitación administrativa, estudios ambientales y sociales”. Noventa de los 330 MW serán con biomasa. En la actualidad, de los 274 MW que hacen líder a Andalucía en biomasa eléctrica en España, 180 corresponden a plantas de Ence. Para toda España, sin contar los nuevos proyectos, suma casi 400 de los 718 MW existentes.
A los 137 MW de las plantas de Huelva, los 27 de Lucena (Córdoba) y los 16 de Villanueva del Arzobispo (Jaén), Ence quiere sumar cuarenta en El Ejido y cincuenta en Córdoba. En cuanto a la primera, la potencia varía según qué documento se consulte. En el proceso de información pública sobre la autorización ambiental integrada, de enero de 2018, aparece con 50 MW, en una nota de prensa de Ence de agosto del mismo año baja a 31,5 MW y tanto en su informe de sostenibilidad de 2019 como ahora lo suben a 40 MW.
El Ejido depende de que una nueva subasta “dé seguridad al proyecto”
Ence cita este proyecto como el más avanzado, aunque está supeditado a las nuevas subastas de electricidad renovable. Confían en que “la publicación de las subastas, reflejadas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIE) se produzca pronto, algo indispensable para dar seguridad al proyecto”. Tambin afirman que la planta de El Ejido “está diseñada para dar una solución ambiental efectiva a problemas de la zona valorizando subproductos de invernaderos”.
En el mencionado informe de sostenibilidad de 2019 aseguran que “aunque parte de estos restos se gestiona mediante compostaje, los gestores locales apenas tienen la capacidad necesaria para valorizar una pequeña parte, y se genera un grave problema ambiental con vertidos ilegales e incontrolados a cañadas o escombreras ilegales”.
Residuos de invernaderos en El Ejido y subproductos agrícolas en Córdoba
Añaden que la planta “se ha diseñado como cogeneración, dado que empleará vapor extraído de la turbina para secar las matas que, en invierno, pueden llegar con una humedad del ochenta por ciento”. En cuanto a su situación actual, en la nota de prensa exponen que durante la ralentización derivada de la situación provocada por la Covid-19 han aprovechado para trabajar intensamente en la ingeniería y logística del proyecto.
En cuanto a la planta de cincuenta megavatios a instalar dentro del término municipal de la ciudad de Córdoba, explican que presentarán la solicitud administrativa previa y ambiental en las próximas semanas. En este caso, también aseguran que se valorizarán fundamentalmente subproductos agrícolas de la zona.
Zona 5 de radiación solar para las plantas fotovoltaicas
De los proyectos con energía solar fotovoltaica, el mayor, de cien megavatios, se ubicará en el término municipal de Andújar, en Jaén; el siguiente de, noventa megavatios, irá a la localidad sevillana de Salteras; y un tercero de cuarenta megavatios al término onubense de Lepe. Los diez megavatios hasta llegar a los 240 servirán para aumentar el complejo energético ya instalado por Ence en Huelva.
“Todas las localizaciones para las plantas fotovoltaicas han sido seleccionadas cuidadosamente y están en la zona 5 de radiación solar, la clasificación más alta según la media global diaria al año” afirman. Esta ubicación y la biomasa que entrará en las nuevas plantas de El Ejido y Córdoba permitirá cumplir, según Ence, con su función principal: “cubrir las necesidades eléctricas anuales de más de 120.500 hogares a partir de fuentes renovables”.
