En la reunión se incidió en que el desarrollo de nuevos sistemas a partir de biomasa agrícola y forestal permite generar innovaciones y puestos de trabajo en zonas rurales de la UE, pero el secretario general del COPA y de la COGECA, Pekka Pesonen, declaró “que es necesario reforzar y armonizar más las medidas encaminadas a desarrollar las fuentes de energía renovables, con el fin de llegar a la cuota de mercado del 20% del suministro energético en 2020”. Y es que, según ambas organizaciones, aunque el suministro de biomasa agrícola y forestal está garantizado, la agricultura y la silvicultura de la UE-27 están lejos de su pleno potencial de producción en este campo.
En Galicia faltan toneladas de biomasa
Un ejemplo del desfase entre la potencial disponibilidad de biomasa y la producción real destinada a centrales de generación de electricidad lo ofrece Galicia. Según cálculos de la Consejería del Medio Rural de la Xunta, sólo en residuos forestales se generan más de 995.000 toneladas al año. Sin embargo, el aprovechamiento real como biomasa no alcanza las 142.000 toneladas, procedentes principalmente de tratamientos silvícolas y cortas finales.