La CE ha aprobado en su última convocatoria del programa LIFE 96 proyectos presentados por 21 países, que suman una inversión total de 264,8 millones de euros, de la que la UE cofinanciará 160,6 millones. El programa se divide en tres apartados: medio ambiente y eficiencia en el uso de los recursos, naturaleza y biodiversidad y gobernanza e información ambiental. España, un año más, es el Estado miembro que más proyectos ha visto aprobados (28), acaparados mayoritariamente (23) por los de medio ambiente y eficiencia en el uso de recursos.
Cinco de estos proyectos están relacionados directa o indirectamente con el aprovechamiento energético del biogás. El Instituto Tecnológico Metalmecánico de Valencia (Aimme) lidera el proyecto In-BRIEF, acrónimo de Integrated business model for turning bio-waste and sewage sludge into renewable energy and agri-urban fertilizers. El objetivo es desarrollar un modelo de gestión integrada para el uso de los recursos (biogás y fertilizantes) derivados de residuos de empresas agroalimentarias y lodos de depuradoras, para lo que se construirá un prototipo escalable en el plano industrial.
Producir un 50% más de biogás
Anadry (Dry anaerobic digestion as an alternative management and treatment solution for sewage sludge) es el nombre del proyecto que coordina Depuración de Aguas del Mediterráneo (DAM). Según informan desde esta empresa, “el objetivo es mejorar la rentabilidad de las depuradoras de aguas residuales de menor tamaño y que no disponen de instalaciones para la digestión anaerobia”. El trabajo de DAM consiste en “aplicar una tecnología compacta de digestión anaerobia que incrementa la temperatura de los fangos para conseguir mejorar la estabilización del producto final”. Al igual que en el caso anterior, los resultados se optimizan con la producción de biogás y fertilizantes.
En Saving-E, la Universitat Autònoma de Barcelona intenta igualmente que su iniaciativa aumente la rentabilidad de las plantas de biogás asociadas a depuradoras de aguas residuales. Su meta es producir en una planta piloto que se instalará en Rubí (Barcelona) un 50% más de biogás que con las tecnologías actuales, además de ahorrar energía y reducir vertidos de nitrógeno y emisiones de gases de efecto invernadero.
Gasificación de la biomasa del corcho
Con Ramses (Enhanced reclaimed water quality through mainstream anaErobic treatment using Supported biomass growth) buscan principalmente mejorar la calidad del agua resultante de la depuración, pero también rentabilizar la producción de biogás añadiendo residuos de la industria agroalimentaria murciana. Por su parte, en el LIFE Smart Fertirrigation, liderado por la cooperativa Copiso Soria, también se cuenta de manera indirecta con el biogás, para secar purines en cuyo proceso se obtienen fertilizantes tanto sólidos como líquidos.
En el ámbito de la bioenergía, y sin salir de la Península, son destacables también Ecorkwaste, encabezado por la Universitat Politècnica de Catalunya, y No_Waste, de la Universidad de Aveiro, en Portugal. El objetivo del primero es la reutilización completa de los residuos de la industria del corcho, que incluye el uso de tapones y polvo en procesos de gasificación de la biomasa mediante leche fluido. No_Waste buscará combinar diversos residuos biodegradables, incluidos cenizas de procesos de combustión de la biomasa, para la regeneración de suelos degradados.