Con la puesta en marcha de la segunda fase (un segundo tanque), hace un par de meses en la granja porcina de Agronsella en Undués de Lerda, inauguraba a pleno rendimiento una planta de biogás pionera en la producción de energía. Cerrada la vía de las primas por producción de electricidad para las nuevas plantas industriales, la ingeniería Biovec ha comenzado a diseñar e instalar otras en las que el autoconsumo térmico sea la baza a jugar. Como el resto, la tecnología se basa en la digestión anaerobia de los propios purines generados en la granja, con lo que se obtiene biogás, combustible utilizado para la calefacción de las instalaciones.
No obstante, Óscar Bartomeu advierte sobre las condiciones que deben reunir este tipo de plantas: “Son pequeñas y adaptadas a las necesidades de calor y la rentabilidad depende mucho de la materia prima, de la valorización del digestato, de la necesidad constante o no de calefacción y del precio de la energía”. Bartomeu aclara a Energías Renovables que “no es lo mismo competir con el precio del gas natural en red de un gran comprador que con el propano, gas natural licuado o gasoil. Y no es lo mismo una granja de pollos que quiere calor unos meses al año que una de cerdas que quiere calor todo el año”.
En Valladolid y Navarra las siguientes
El proceso se basa en la digestión en un digestor convencional de un concentrado de purín que reduce el consumo de calor para el proceso. Posteriormente el material digerido se mezcla con el material no concentrado y se consigue así la digestión de todo el producto con un mínimo coste en energía. El gas generado se quema en una caldera y el producto, digerido y desodorizado, pasa a una balsa de la granja para posteriormente aplicarlo al campo como fertilizante.
Según cálculos de Biovec, se estima que anualmente se generarán unos 150.000 m3 anuales de biogás que corresponden a unos 900.000 kWh anuales, lo que supondrá un ahorro de unos 90.000 litros de gasoil y 70.000 euros. En la página web de esta ingeniería anuncian además que está acabando la fase de obra civil de otra planta de similares características para Santibañez Energy en Iscar (Valladolid). En este caso se modifica una caldera de vapor de 1 MW de potencia para que funcione con biogás y se espera realizar la puesta en marcha en febrero del 2014. Por estas fechas está previsto que se inicien las obras de otra planta en Navarra.