Hace un par de años, en la prueba principal del calendario europeo de la Shell Eco-Marathon, el equipo del campus de Alcoy (Alicante) de la UPV acabó sexto en la categoría de etanol, con una distancia recorrida de 973 km con un solo litro de etanol. La pasada semana, en el circuito de Rockingham, el IDF Eco-Marathon superó ampliamente esa marca en 300 kilómetros, para situarla en 1.294 kilómetros y proclamarse vencedor. El primer puesto conseguido en esta prueba previa les permite clasificarse directamente para la Shell Eco-Marathon Europe 2016.
“En esta competición, la organización quería probar nuevos sistemas de medición, seguridad o modificaciones en el reglamento para las grandes competiciones del próximo año. Fueron bastantes los cambios que tuvimos que realizar en el coche para adaptarlo a las pruebas que querían. Y el resultado ha sido extraordinario, con nuevo récord incluido”, afirma una de las integrantes del equipo, Paloma Ortega. Adrián Ibáñez, Marcos Lasso, Andrés Urbano y David Bocanegra forman el resto del equipo, coordinado por el profesor Vicente Colomer.
Nuevo motor y carrocería para el futuro
La marca obtenida en su categoría hizo que el IDF Eco-Marathon se situara en el cuarto puesto de la clasificación general. Junto a ellos, en la Shell Eco-Marathon Rockingham se inscribieron cerca de 40 equipos procedentes de centros escolares de varios países de Europa, de los que sólo participaron obteniendo una marca final 15, procedentes de Reino Unido, Francia, Bélgica, España y Alemania.
Desde la UPV informan que “el equipo se despide con este récord del motor y transmisión que se estrenaron en este mismo circuito en 2008. Ahora, entre sus objetivos se encuentra la construcción de una nueva carrocería con materiales compuestos de carbono y fibras naturales y la adaptación de otro motor, transmisión y centralita electrónica”. Los trabajos se llevan a cabo en coordinación entre alumnos del campus de Alcoi de la UPV, del Máster Universitario en Diseño y Fabricación Integrada Asistidos por Computador de la UPV y del Instituto de Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey en Toluca (México), donde Vicente Colomer realiza una estancia.
Sobre el prototipo, el IDF15, precisan que “está fabricado en su totalidad en fibra de carbono, su combustible es etanol E100 y posee un motor de 25cc con inyección electrónica, llantas lenticulares y transmisión por correa. Tiene una longitud de 3’10 m, una anchura de 0,6 m, una altura de 0,625 m y un peso inferior a 40 kg. El chasis es un monocasco de fibra de carbono con una estructura de nido de abeja de fibra de vidrio y papel fenólico para separar el compartimento del motor y el del conductor. Los componentes mecánicos están realizados con aluminio aeronáutico y titanio”.