La Asociación Española del Gas (Sedigas) y sus socios han presentado un decálogo de compromisos y buenas prácticas para el desarrollo y operación de plantas de producción de biometano en España con el que se comprometen a impulsar el despliegue del biometano en nuestro país bajo principios de sostenibilidad, responsabilidad y colaboración con todos los grupos de interés. "Este vector energético, que se genera a partir de residuos orgánicos, no solo reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también fomenta la economía circular, generando empleo local y ofreciendo una solución eficiente para la gestión de residuos", señalan en un comunicado. Por su parte, para Joan Batalla Bejerano, presidente de Sedigas, "el biometano es una solución esencial para la descarbonización y la transición energética de España. Nuestros socios no solo apoyan su despliegue desde una perspectiva técnica, sino que están plenamente comprometidos con la transparencia, el diálogo social y la colaboración responsable, asegurando que los beneficios de esta tecnología lleguen al conjunto de la sociedad".
Este decálogo refleja los esfuerzos conjuntos de la industria y enfoca sus esfuerzos en distintas áreas clave:
• Transparencia en la cadena de valor: Sedigas y sus socios aseguran que el biometano se produce y distribuye bajo los más altos estándares de sostenibilidad y responsabilidad ambiental, manteniendo informada a la sociedad de una manera clara y accesible.
• Diálogo abierto con la sociedad: Promueven una colaboración activa con las administraciones públicas, las comunidades locales y otros grupos de interés, creando un espacio de entendimiento mutuo y adaptación a las necesidades de los proyectos y la realidad social del entorno.
• Divulgación de los beneficios del biometano: Los socios de Sedigas difunden de manera cercana los beneficios del biometano en la reducción de emisiones y su contribución al desarrollo económico y social de las regiones en las que se implanta.
• Colaboración público-privada: Trabajan estrechamente con las administraciones para crear marcos normativos que promuevan un desarrollo justo y sostenible del biometano.
• Innovación continua y beneficio social: Fomentan la innovación tecnológica en la producción, distribución y comercialización del biometano, garantizando su viabilidad a largo plazo, con un enfoque en el beneficio colectivo y el desarrollo económico y social de los territorios.
España cuenta con un gran potencial para liderar el despliegue del biometano en Europa. El país tiene la capacidad de generar hasta 163 TWh de biometano al año, lo que cubriría el 50% de la demanda de gas natural del territorio. Este desarrollo no solo contribuiría a reducir las emisiones, sino que también impulsaría la economía local, movilizando inversiones de hasta 40.500 millones de euros y generando más de 60.000 empleos.