El proyecto Upbiomet+2 busca aprovechar la ruta denominada Direct Interspecies Electron Transfer (DIET), un proceso metabólico avanzado que mejora la transferencia directa de electrones entre microorganismos durante la digestión anaerobia. Para ello, se han utilizado técnicas como la incorporación de biochar, un material conductivo que facilita esta transferencia, y electrodos de grafito para aplicar un ligero voltaje. Estas innovaciones aumentan la producción de metano y se han probado en condiciones cercanas a escenarios industriales reales, empleando sustratos de empresas de la Comunidad Valenciana.
Desde AINIA indican que en la fase final del proyecto, se han desarrollado dos prototipos que operan a diferentes temperaturas (mesófila y termófila). Esto ha permitido analizar cómo estas tecnologías influyen en la cantidad y calidad del biogás producido, los cambios en las comunidades microbianas durante el proceso, la posibilidad de reutilizar el biochar y las limitaciones técnicas de trabajar a temperaturas más altas.
El proyecto Upbiomet+2 está financiado por el programa de ayudas impulsado por el l Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) y la Unión Europea y muestrra el papel del biogás como una solución clave en la transición energética. “Al mejorar la calidad del biogás y acercarlo al estándar del biometano, se avanza hacia la descarbonización del sector energético y la valorización de recursos industriales”, señalan al respecto desde el centro tecnológico valenciano.
Con más de 35 años de experiencia en el impulso de la competitividad de las empresas a través de la innovación, el centro tecnológico AINIA cuenta con una amplia base social empresarial, con más de 800 empresas asociadas y más de 1.600 clientes. Su sede central está en Valencia.