La investigadora del NREL Liz Ware dirige este proyecto, que cuenta con la colaboración de LLNL, Yale Carbon Containment Lab y socios industriales. Ware explica que el objetivo fundamental de la investigación es comprender mejor la durabilidad de diferentes fuentes de biomasa, productos bioderivados y escenarios de almacenamiento mediante experimentos de laboratorio y en campo. También se busca desarrollar las mejores prácticas y protocolos para un marco del proceso MRV que permita comparar las tecnologías híbridas existentes e impulsar la toma de decisiones al respecto.
"Las plantas absorben CO2, igual que nosotros inhalamos oxígeno, y almacenan el carbono en forma de biomasa cuando crecen. Así, el CO2 se convierte en material vegetal, como celulosa y lignina”, explica Ware. “Lo que nosotros hacemos, mediante ingeniería humana, es almacenar de nuevo en el suelo el CO2 que estaba en el aire, en forma de biomasa o productos bioderivados, como el carbón vegetal y el biopetróleo”, añade.
Según la investigadora, se espera avanzar en la medición y validación de estas técnicas de eliminación del carbono de la biomasa en toda la cadena de valor. Este proyecto cuenta con la colaboración de socios industriales como Charm Industrial, Carba, Mote, Isometric, Stripe, Kodama Systems y Arbor Energy. Además, está apoyado por el DOE, que destinará 15 millones de dólares a investigaciones dirigidas a mejorar la medición, notificación y verificación de las tecnologías de eliminación del dióxido de carbono.
Esta industria tiene el potencial de ayudar a mitigar el cambio climático abordando las emisiones de carbono existentes y eliminándolas de la atmósfera. Pero para alcanzar este objetivo, los científicos deben establecer primero marcos y metodologías científicos sólidos que permitan contabilizar estos esfuerzos, proporcionando a los gobiernos y a las empresas un enfoque unificado para el seguimiento de los impactos climáticos de sus inversiones.
Con años de experiencia en descarbonización industrial, eliminación y captura de CO2, junto con utilización y almacenamiento de carbono (CCUS), el NREL dirige dos de las propuestas ganadoras de la financiación del DOE y colaborará en una tercera liderada por el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore (LLNL).