"Este es un año críticamente importante para nuestra industria. Los Estados miembros están poniendo en marcha mandatos de biocombustibles avanzados basados en la Directiva de Energías Renovables. La propuesta de la Comisión Europea sobre Fit for 55 está creando un sentido de urgencia sobre la necesidad de acelerar la reducción de las emisiones del transporte. Sabemos que los biocombustibles avanzados son una parte cada vez más importante de la solución y nuestra coalición quiere estar muy comprometida en estos debates para que se puedan asegurar las inversiones en crecimiento verde sostenible", afirma el nuevo presidente de LSB, Marko Janhunen, que ocupará el cargo hasta finales de 2022.
Los biocombustibles avanzados se fabricar a partir de desechos y residuos, tal y como se definen en el Anexo IX Parte A de la Directiva de Energías Renovables, y constituyen una solución sostenible para reducir las emisiones en el transporte; incluidos, también, los modos de transporte más difíciles de descarbonizar, como la aviación, el transporte marítimo y el transporte pesado. Desde la adopción de la Directiva de Energías Renovables (REDII) en 2018, varias inversiones han avanzado y están contribuyendo al objetivo de la UE de lograr una reducción drástica de las emisiones de CO2 del transporte. Pero la coalición añade que, cara a lograr la neutralidad climática en 2050, es necesario tener objetivos intermedios más ambiciosos para 2030.
Los biocombustibles avanzados son una solución rápida para descarbonizar el transporte. De acuerdo con LSB, aportan múltiples beneficios en términos de reducción de CO2, inversiones, ingresos para los agricultores y propietarios de bosques, mejora de las prácticas de gestión de residuos, creación de empleo y aumento de la seguridad energética.