El diario oficial de la UE publicó el pasado miércoles que la demanda de bioetanol de la UE, al igual que la de otros países, se desplomó debido a la pandemia de la Covid-19 y cualquier desvío del exceso de existencias en los países productores hacia la Unión Europea podría frenar la recuperación de los productores comunitarios, según informa Reuters.
De acuerdo con dicha información, Francia ha informado a la Comisión Europea –que coordina la política comercial para el bloque de 27 naciones– que las importaciones de bioetanol aumentaron en más de un 500% entre 2017 y 2019. Sin embargo, el consumo en la UE de etanol renovable para combustible aumentó solo un 10% en ese período. Francia también indicó que se habían subestimado los precios de los productores de la UE en un promedio del 15%.
Alrededor del 84% de la producción mundial de bioetanol se localiza en Estados Unidos y Brasil. Un ligero exceso de capacidad en Estados Unidos ha llevado a países como Brasil, China, Perú y Colombia a adoptar medidas para limitar las importaciones.
La UE respondió en 2018 a una amenaza similar, en este caso de aumento de las importaciones de acero, con un sistema de vigilancia que se traduce en cuotas para determinadas calidades y aranceles si se superan esas cuotas.
"Evidentemente, las cantidades que antes se exportaban desde Estados Unidos a esos mercados podrían reorientarse ahora hacia otros mercados como, por ejemplo, el de la UE", señala el diario comunitario. Las medidas antidumping sobre el bioetanol estadounidense expiraron en 2019.