Aunque en 2012 Audi aseguraba que litros de e-diesel y e-etanol estarían disponibles de forma inmediata, lo cierto es que en el comunicado de prensa actual en el que anuncia la producción de los primeros 60 litros de e-gasolina reconoce que sigue la fase piloto de producción de todos ellos. Solo el e-gas que se genera en su factoría de la ciudad alemana de Werlte ha llegado a la escala comercial.
Global Bioenergies, socia tecnológica de Audi para el desarrollo de la e-gasolina, asegura que “la capacidad de producción de esta gasolina renovable se incrementará en 2019 con la adición de una unidad dedicada a la producción de combustibles”. Esto se llevará a cabo en la planta de demostración de esta compañía en otra ciudad alemana: Leuna.
De isobuteno gaseoso a iso-octano
Como explican desde Audi, actualmente se produce a partir de biomasa en un proceso de dos pasos. “En el primero –concretan–, Global Bioenergies produce isobuteno gaseoso (C4H8); en el segundo, el Centro Fraunhofer de Procesos Biotecnológicos Químicos en Leuna emplea hidrógeno adicional para transformarlo en iso-octano (C8H18). El combustible está libre de azufre y benceno y, por lo tanto, es especialmente bajo en contaminantes cuando se quema”.
Global Bioenergies se autodefine como “una de las pocas empresas en el mundo, y la única en Europa, en desarrollar un proceso para convertir los recursos renovables en hidrocarburos por fermentación”. Afirman centrarse inicialmente en la producción orgánica de isobuteno al ser “uno de los componentes más importantes de la industria petroquímica para fabricar combustibles, plásticos, vidrio orgánico y elastómeros”.
Su socia, la compañía automovilística, añade que a medio plazo el desarrollo de las investigaciones apunta a “modificar el proceso de producción para que no requiera biomasa; en este caso, el CO2 y el hidrógeno producido a partir de fuentes renovables deberían ser materias primas suficientes”.
Mayor eficiencia de los motores
Audi también asegura que sus ingenieros “examinan ahora el comportamiento de combustión y emisión del combustible renovable en un motor de prueba. Como combustible sintético de alta pureza con muy buenas propiedades antidetonantes, ofrece la posibilidad de aumentar aún más la compresión del motor y su eficiencia”.
Fuera del trabajo conjunto entre Audi y Global Bioenergies, el proyecto de investigación más reciente en torno a los combustibles sintéticos es To-Syn-Fuel, en el que participa un socio español: centro tecnológico Leitat. Está dentro del programa Horizonte 2020 de la UE y su objetivo principal es diseñar, construir, operar y demostrar la viabilidad de un sistema de producción de combustibles sintéticos e hidrógeno a partir de biomasas residuales.