La cumbre fue inaugurada ayer por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, quien defendió la necesidad de apostar por las nuevas tecnologías y calificó de claves la colaboración público-privada y la neutralidad tecnológica para lograr el objetivo compartido de reducción de emisiones en el transporte. En cuanto al gas natural, la ministra dijo que "se trata de una opción de presente capaz de hacer una transformación progresiva hacia el gas renovable".
Junto a ella, participaron en esta primera jornada el máximo responsable de producción de vehículos comerciales de Iveco, Ángel Rodríguez Lagunilla, y el vicepresidente ejecutivo de Compras de SEAT, Alfonso Sancha. Dos marcas de automóviles que producen vehículos que operan con gas natural y que en el caso del vehículo pesado Iveco S-Way puede utilizar también biometano, según dijo Lagunilla. Cuando lo hace, añadió, "es un vehículo neutro en carbono".
Alfonso Sancha dijo, por su parte, que la tecnología de GNC está plenamente introducida en los procesos de producción de la planta de Martorell de SEAT, mientas Mikel Palomera, director general de SEAT España, aseguró que se trata de "una opción de presente". Como muestra de ello, indicó que en poco más de cuatro años este fabricante ha pasado de vender 3.700 coches GNC al año en Europa a rebasar la cifra de los 20.000 en 2019.
El evento también contó con la participación de Tomas Hilse, presidente mundial de la marca Iveco, quien se refirió al gas natural como el punto de partida en el camino hacia las emisiones cero: "El GNL es un puente hacia una tecnología que jugará un papel clave, el hidrógeno. Comenzaremos con hidrógeno azul producido a partir de metano, luego pasaremos al hidrógeno verde de fuentes renovables. Ambas tecnologías convivirán en un futuro transporte descarbonizado".
Gases verdes en el transporte municipal
Una de las ciudades pioneras en el uso del biogás en los autobuses municipales es Bristol, donde First Group –la operadora de los autobuses municipales de la ciudad inglesa– ya cuenta con 99 autobuses a biometano y espera ampliar la flota hasta 180 en el próximo año, para así alcanzar su objetivo: cero emisiones en 2035. Su representante, Rob Pymm, afirmó en el encuentro: “Estamos completamente comprometidos con el biometano, nuestra experiencia es muy buena. Se trata de una solución robusta tanto para el transporte urbano como interurbano, de fácil mantenimiento y económica”.
El ejemplo de la ciudad de París es igualmente interesante: en 2025, la totalidad de sus autobuses serán bien de biometano, bien eléctricos. Para ello están habilitando 13 cocheras para suministro de bioGNC sin interrumpir la operación de la flota.
Ya en nuestro país, David Campión, presidente de la mancomunidad de la Comarca de Pamplona, indicó: “Queremos aprovechar al máximo la energía de los residuos urbanos”. Con el biometano producido a partir de estos residuos moverán una flota de 100 autobuses y 113 vehículos de recogida de basuras. La Comarca será neutra en carbono en 2030.
Por su parte, Gerardo Lertxundi, consejero delegado de Transportes Municipales de Barcelona (TMB), se mostró esperanzado de que pronto se puedan sortear las barreras que impiden que el biometano se desarrolle en el transporte municipal del mismo modo que se hace en otros países de Europa. Respecto al hidrógeno, Lertxundi anunció que TMB ya ha adjudicado los ocho primeros autobuses de Hidrógeno de su flota y está licitando una estación pública de abastecimiento.
En relación al uso del hidrógeno en el transporte, la ministra de Industria subrayó el futuro prometedor de esta tecnología, que se quiere impulsar desde el gobierno de España. Una tecnología por la que apuestan también compañías como Toyota España e Iveco, como indicaron Miguel Carsi, presidente y CEO de Toyota España, y Pablo Cebrián, vicepresidente de Desarrollo e Ingeniería de Producto en Iveco.
Madrid, explicó Cari, pronto contará con la primera hidrogenera donde repostará una flota de 12 Toyotas Mirai (primer vehículo eléctrico de pila de combustible de hidrógeno fabricado en serie en el mundo). Por su parte, Iveco, junto a Nikola, están desarrollando un camión de hidrógeno que llegará al mercado en 2023.
La penetración del hidrógeno en el transporte requiere el desarrollo en paralelo de la red de suministro. Un aspecto al que se refirió Miguel Mayrata, director de diversificación de negocio de Redexis, quien considera que el despliegue debería comenzar con las flotas cautivas que cuenten con estaciones que progresivamente se abran al público.