Galp pondrá en marcha de dos proyectos a gran escala que incluyen una unidad avanzada de biocombustibles con una capacidad de producción de 270.000 toneladas al año, en colaboración con Mitsui, y la instalación de electrolizadores de 100 megavatios (MW) para producir hidrógeno verde. Está previsto que las dos nuevas unidades empiecen a funcionar a finales de 2025. En palabras de Paula Amorim, presidenta de Galp, "estos proyectos, dos de los mayores proyectos de su naturaleza, representan una inversión global de 650 millones de euros. Se trata de una contribución significativa a la transformación y el crecimiento del sector industrial en Portugal, que sitúa a Galp a la vanguardia del desarrollo de soluciones con bajas emisiones de carbono, imprescindibles para garantizar la transición energética".
Por su parte, la unidad de biocarburantes avanzados se basa en una joint-venture (75/25) entre Galp y Mitsui para producir y comercializar biocombustibles avanzados en una unidad adyacente a la refinería de Sines, con una capacidad de 270.000 toneladas anuales. La planta producirá gasóleo renovable (aceite vegetal hidrotratado) y combustible de aviación sostenible (SAF) a partir de residuos usados, lo que permitirá -según informa Galp- reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en unas 800.000 toneladas al año en comparación con las alternativas de origen fósil disponibles. La inversión total en esta unidad industrial se estima en unos 400 millones de euros.
Por su parte, la unidad de hidrógeno verde tiene como objetivo los 100 MW de capacidad de electrólisis, capaz de producir hasta 15.000 toneladas de hidrógeno renovable al año. La integración de este proyecto a gran escala en las operaciones de la refinería de Sines permitirá sustituir alrededor del 20% del consumo actual de hidrógeno gris y podría representar una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de, aproximadamente, 110.000 toneladas al año. Los electrolizadores se alimentarán con electricidad renovable, mediante acuerdos de suministro a largo plazo, aprovechando también la capacidad de generación renovable de Galp. La inversión total en este proyecto de hidrógeno verde se estima en unos 250 millones de euros.