Tal como explica el CEO de Greene, Juan José Hernández, “la aportación de 4,5 millones de euros que va a realizar el CDTI nos va a proporcionar la estructura financiera adecuada para llevar a cabo los proyectos industriales que tenemos previstos en los próximos cuatro años”. Esta inyección, añade, “nos permitirá completar la financiación necesaria para la puesta en marcha de las primeras plantas industriales basadas en la tecnología que ha estado desarrollando Greene en los últimos años”.
La ampliación de capital por parte del CDTI se realiza en coinversión con Moira y está enmarcada en el plan de negocio que Greene Waste to Energy lleva desarrollando en los últimos dos años y que encuentra su continuidad en esta apuesta del CDTi por la innovación en valoración de residuos desarrollada por la compañía. De esta forma se completará una ampliación global de 9,6 millones de euros en 2021. A la vez se está trabajando en la financiación de las primeras plantas industriales, estando en las fases finales de captación de capital necesario y que servirán para ayudar a solucionar el grave problema del tratamiento de residuos que existe actualmente.
Las plantas de Greene permiten la gestión de residuos de todo tipo, tanto de empresas como de instituciones, y su implantación permite mejorar en la RSC, rebajar los costes gracias una reducción del gasto energético, conseguir el certificado de empresa de residuo 0 y entrar de lleno en el marco de la economía circular a un coste de inversión bajísimo y con riesgo mínimo, según destacan desde la compañía, puesta en marcha en 2011 por cuatro emprendedores de Elche. En la actualidad cuenta con más de 40 empleados y el respaldo inversor de Moira Capital.