El biopropano cumple con la Directiva Europea de Energía Renovable (RED), "lo que le convierte en una solución perfecta a corto plazo para la descarbonización de las flotas de autobuses y camiones urbanos pesados", según señalan desde BeGas, empresa especializada en el desarrollo de motores alimentados al 100% con autogás o biopropano.
"Gracias a la utilización de este combustible alternativo, las corporaciones locales pueden avanzar en sus objetivos de neutralidad climática. Basta con sustituir los motores diésel de las flotas de camiones y autobuses urbanos por otros propulsados por biopropano", añaden desde la compañía, que analiza las principales características de este combustible:
• Se trata de un gas que puede transportarse fácilmente por tierra y mar, al licuarse a alta presión. Se almacena y suministra del mismo modo que el autogás (un gas licuado ampliamente extendido en el sector de la automoción) lo que facilita el acceso de las corporaciones locales a energías que permitan sumarse a la descarbonización del transporte de manera inmediata y sin realizar grandes desembolsos.
• Fomenta la reutilización de los vehículos. Un camión urbano, de entre los tres y los diez años de antigüedad, puede ser remotorizado con un motor de biopropano, simplemente sustituyendo el motor diésel por el del biogás. Por otro lado, por el precio de compra de un vehículo nuevo, pueden remotorizarse hasta cinco camiones, lo que contribuye, además, a la sostenibilidad económica de las entidades municipales. La posibilidad de apostar por la economía circular y el retrofit, equipando a las flotas con motores ecológicos, permite alargar su vida útil y evita la generación de más de 16.000 kg de residuos por vehículo.
• Reduce la huella de carbono y anula prácticamente las emisiones NOx. Los motores propulsados por biopropano pueden llegar a reducir el 80% de las emisiones de CO2, cifra muy superior a la fijada por la UE en Fit for 55, cuyo objetivo es reducir las emisiones en al menos un 55% de aquí a 2030. Por estas razones, así como por su capacidad para reducir al mínimo las emisiones NOx y las partículas, los vehículos propulsados por biopropano obtienen la etiqueta Eco-DGT.