Las Islas Baleares recibirán 2.944.884 millones de euros de ayudas para fomentar el despliegue de fuentes de energía renovable térmicas en sectores productivos como el industrial, el agropecuario y el de servicios, pero también en establecimientos e infraestructuras del sector público, así como actuaciones que acometan empresas en modalidad servicios energéticos en el sector residencial, de forma que contribuyan al proceso de descarbonización de la economía y, en el caso de las empresas, consoliden su competitividad en el mercado. Es decir, ayudas destinadas a la puesta en marcha de instalaciones de energía solar térmica, geotermia, energía ambiente (aerotermia e hidrotermia), biomasa o microredes de calor y frío de menos de 1 megavatio (MW) de potencia.
Entre las actuaciones subvencionables se encuentran aplicaciones para la producción de frío y/o calor en edificios (agua caliente sanitaria y climatización) o en procesos industriales (limpieza, secado, baños térmicos para el tratamiento de superficies, servicios de lavandería, lavado de vehículos, pasteurización y conservación de productos perecederos, climatización de naves de uso industrial, ganado e invernaderos, etc.). Por su parte, entre los costes subvencionables se incluyen, entre otros, la inversión en equipos y materiales, los costes de ejecución de las obras o los sistemas de control y monitorización, tanto de la producción como de la demanda de energía térmica, así como obras civiles necesarias para la ejecución de los proyectos.
La ayuda otorgada cubrirá el 70% de estos costes en el sector público y hasta el 45% en el caso de pequeñas empresas, y en sendos ámbitos se incrementará en un 5% en zonas de reto demográfico: municipios de hasta 5.000 habitantes y municipios no urbanos de hasta 20.000 habitantes, con núcleos de población de menos de 5.000 habitantes.
Esta línea de ayudas desarrollada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), dirigida por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) y sujeta al marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), establece la concesión directa de estas ayudas que se van a ejecutar a través de dos programas de incentivos: el primero, dirigido a sectores de la economía; y el segundo, en el sector público. En el caso de las Islas Baleares, estas ayudas serán gestionadas por la Dirección General de Energía y Cambio Climático, adscrita a la Vicepresidencia y Consejería de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, y el objetivo es llegar a 6,3 MW de energía renovable térmica.