ATH Bionergy anunciaba el pasado mes de marzo su intención de invertir 100 millones de euros en cuatro plantas de biometano en las Islas Canarias. Pues bien, el proyecto ya ha comenzado -cumpliendo con las previsiones- con la construcción de la primera planta en el Puerto de Arinaga (Gran Canaria), a la que le seguirán las instalaciones en Tenerife, Fuerteventura y, finalmente, Lanzarote, y que procesarán los residuos orgánicos de los hoteles y los supermercados de Canarias. La colocación de la primera piedra de la planta ha contado con la presencia del ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, y los presidentes del Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria, Fernando Clavijo y Antonio Morales, según ha informado ATH. Una vez entren en funcionamiento, a partir del año 2026, estas plantas tratarán en conjunto unas 130.000 toneladas de residuos orgánicos, incluyendo residuos alimentarios de los hoteles, residuos de poda, residuos del plátano y de la industria alimentaria y producirán anualmente más de 133 gigavatios hora (GWh) anuales de biometano, que serán suministradas de nuevo a los hoteles e industrias de la zona.
Según el gerente de la empresa ATH Bioenergy, Rafael Zárate, la previsión es que la planta de Gran Canaria esté operativa en aproximadamente 14 meses: "confiamos en que pueda empezar a moverse de tierra este verano. Luego, le seguirá la de Tenerife, con un lapso de seis u ocho meses, y, después, Lanzarote y Fuerteventura, cada uno con otro lapso de ocho meses por año. Prácticamente, todo el proyecto en las cuatro islas será de casi cinco años". A su vez, cifra en más de 25 millones de euros la inversión realizada en Gran Canaria, señalando que se trata del primer proyecto que se pone en marcha en Canarias.
Otra parte importante del proyecto es que el producto, una vez conseguido el biogás, se seguirá gestionando para obtener fertilizantes para la agricultura. "El sector agrícola en Canarias demanda mucho fertilizante; y este sería un fertilizante orgánico de origen local. Así se reducirá el alto consumo de fertilizantes químicos en Canarias y en Gran Canaria", señala Zárate. En este sentido, la planta producirá en la Isla unas 5.000 toneladas fertilizante líquido y unas 4.000 toneladas de sólido al año.