Según la última información aportada por la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom) y la revista Bioenergy International, en España hay instaladas ochenta plantas operativas de fabricación de pélets con una capacidad de producción que supera los 1,3 millones de toneladas anuales. Sin embargo, los datos de producción apenas sobrepasan un tercio de esa cifra: 475.000 toneladas.
En el número de abril de la revista Energías Renovables aparece un extenso reportaje sobre la situación del mercado de pélets en España, en el que se destaca el impulso que la nueva dirección de Apropellets pretende dar al sector y a la propia asociación. Tiene la fuerza de contar con trece socios que suman 405.000 toneladas anuales de capacidad de producción (un tercio del total) y 230.000 de producción real (casi la mitad del total).
Producción, distribución, logística y promoción de un biocombustible renovable
Apropellets mantiene su objetivo primordial, presente desde su creación en 2008: “proteger los intereses comunes en el ámbito de la producción, distribución, logística y promoción de los pélets como biocombustible renovable”. A este añade otros que considera determinantes: “investigación sobre producción, logística, distribución y posibilidades en el mercado energético; fomento de la cooperación y la colaboración entre sus asociados; y actuación como interlocutor en las relaciones laborales, contribuyendo en paralelo con los sindicatos a la defensa y promoción de los intereses económicos y sociales que le son propios”.
Luz Pardo asegura que “queremos hacer llegar nuestra voz a las instituciones públicas (Europa, España y comunidades autónomas) donde se toman decisiones que afectan a esta industria, y a la vez dotar a nuestros asociados de nuevas herramientas que ayuden a impulsar la actividad, tanto en el terreno industrial (procesos productivos, calidad, comercialización de pélet...), como en el social (marketing, comunicación...)”.
Afrontando problemas, críticas y desafíos
El martes de la próxima semana (12 de abril) tendrá lugar la primera asamblea tras la formación de la nueva directiva de Apropellets, en la que no se dejarán de abordar también las dificultades por las que pasa el sector. De entrada, no se niega la sobrecapacidad de producción instalada y las paradas o cierres que sufren algunas empresas. Tampoco otros aspectos a los que tienen que hacer frente, como las críticas y campañas ecologistas contra la quema de pélets en grandes centrales térmicas, el efecto de inviernos menos fríos, la bajada del precio del barril de petróleo y los fraudes en la producción.
En cuanto a estas prácticas fraudulentas, Luz Pardo sostiene que “nuestra intención es ayudar a combatirlo”, y recuerda que ya ha habido multas por este motivo y la apertura de varias investigaciones. “Está claro que existe, pero vamos a la baja en cuanto al número de casos”, añade. En cuanto a rentabilizar la producción, Pardo reconoce que “de cara a la exportación, están mejor ubicadas unas plantas que otras, pero el trabajo en común dentro de la asociación puede facilitar que juntemos paquetes importantes que agilicen y rentabilicen la salida de pélets al exterior”.
Sobre las críticas ecologistas, la nueva presidenta de Apropellets afirma que “también el lobby de los combustibles fósiles ejerce presión en la misma dirección, aunque nosotros debemos seguir incidiendo en mejorar la sostenibilidad de nuestros productos y procesos”. Apostilla que “la biomasa de origen forestal es un biocombustible renovable muy abundante en nuestro país e infrautilizado, ya que aprovechamos sólo 16 millones de metros cúbicos de su crecimiento anual (según datos del Inventario Forestal Nacional), lo que supone el 35% de nuestras reservas, cuando la media europea es del 61%”.