Una información de la versión española de la revista Bioenergy International refleja lo que aún queda por desarrollar en el mercado interno de pélets. Mientras el número de plantas se consolida, e incluso sube, y la calidad de los biocombustibles refuerza a la industria (ya hay cinco empresas certificadas con ENplus), el consumo interno se mantiene bajo mínimos. En la actualidad, sumando las grandes plantas (10.000 t/año) en activo, las cerradas pero no desmanteladas y las pequeñas (4.000 t/año) ligadas a aserraderos y carpinterías se alcanza una capacidad de producción de 800.000 t/año.
La media de producción real, según información extraída de las propias empresas, no supera el 30% de esa capacidad, unas 240.000 t/año, y de estas, solo el 25% (60.000 t/año) se dirigen al mercado interno. En Bioenergy International reconocen que es difícil estimar el consumo actual de pélets de madera en España, ya que no hay cifras oficiales y los productores son reacios a hacer público este tipo de información. Sin embargo, aportan el último dato (2010) de la Asociación de Productores de Pellets de Madera del Estado Español (Apropellets), que cuantificó este consumo en las 60.000 t/año mencionadas. Otras fuentes, como Propellets Austria o la base de datos europea Pellets@las lo situaban en 95.000 t en 2010.
Italia absorbe el 60% de las exportaciones
Aún con la corrección de todas las toneladas a restar a esas 800.000 correspondientes a las nuevas plantas puestas en funcionamiento entre 2011 y 2012, resulta evidente que el destino principal de la producción española es la exportación. Los pélets domésticos se dirigen a Portugal, Irlanda, Reino Unido, Francia e Italia. Este último es el principal destino, ya que se lleva el 60% de toda la exportación. En cuanto al pélet industrial, los clientes se encuentran principalmente en el Reino Unido, Bélgica y Suecia.
Por último, la publicación reafirma la buena relación calidad precio de este biocombustible. El precio del pélet español se mantuvo en el mismo nivel durante los últimos cuatro años. La bolsa de 15 kg tiene un coste medio de 4,10 euros para pélets con alguna garantía de calidad. Recuerdan que “un palé cargado con 70 o 75 sacos de 15 kg cuesta alrededor de 245 euros, por lo que comprando en este formato se puede abaratar el coste de la bolsa hasta en un 8%. Cuando la calidad no está garantizada y/o el pellet no es certificado el precio suele ser inferior”. Por último, se señala que los pellets producidos en España son generalmente de buena calidad, con un contenido energético superior a los 16,5 MJ/kg y de cenizas inferior al 0,5%, “pero sería deseable mejorar algunos aspectos físicos tales como la durabilidad y el contenido de finos”.
Más información:
www.bioenergyinternational.es