“Se recomienda la pronta aprobación del proyecto de orden ministerial por la que se establece un procedimiento de asignación de cantidades de producción de biodiésel para el cómputo del cumplimiento de objetivos obligatorios de biocarburantes de los años 2011 y 2012, sobre el que esta comisión emitió su informe 41/2010, de 29 de diciembre”. Así se expresa la CNE en otro informe, este sobre el nuevo real de decreto de obligación de biocarburantes en el transporte.
La voz de la CNE se une a la de la sección de Biocarburantes de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA), que a finales de febrero hizo la misma petición al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, principalmente para frenar la importación de biodiésel desde Argentina e Indonesia y salvar de la quiebra al sector en España. Industria sigue guardando silencio, aunque diversas fuentes afirman que tiene el tema sobre la mesa y que le quiere dar salida en menos de dos meses. Esto no gustaría a UPI, que como ya demostró en una reciente nota de prensa está frontalmente en contra de la orden.
Los carburantes no se encarecerán tanto como aventura UPI
Sobre estas declaraciones de UPI, APPA Biocarburantes ha manifestado a Energías Renovables su indignación. Según su director, Manuel Bustos, “no es de recibo que UPI, por defender sus propios intereses, pida que no se adopten medidas contra las importaciones desleales. Nos parece muy poco serio porque una de las bases del comercio internacional es competir en igualdad de condiciones”. APPA Biocarburantes repite que nunca ha pedido medidas proteccionistas, sino que se ponga freno a la competencia desleal de Argentina e Indonesia, que está provocando la crisis total del sector español de biodiésel.
En una nota de prensa, UPI afirmaba que “la orden es una amenaza para la competencia y puede suponer para los consumidores un aumento del precio del carburante de hasta 24,5 céntimos de euro por litro”. APPA Biocarburantes considera aberrante esta previsión. “De acuerdo con nuestras estimaciones –aclara Bustos–, el aumento será insignificante (0,005 € por litro de gasóleo), es decir, apenas un 0,38% sobre su precio actual”. En cuanto a la amenaza a la competencia, los fabricantes de biodiésel también manifiestan su sorpresa. “Precisamente será todo lo contrario, ya que la asignación de cinco millones de toneladas de producción de biodiésel entre fábricas radicadas en la Unión Europea, cuando la demanda no llegará siquiera a dos millones de toneladas, aumentará la competencia”, concluye Manuel Bustos.