UNEF acaba de publicar su Informe Anual 2023, que recoge en más de 160 páginas todos los datos consolidados al cierre de 2022 mediante una exhaustiva radiografía del sector solar fotovoltaico nacional. En ella, el autoconsumo fotovoltaico ocupa, lógicamente, lugar destacado. Entre otras cifras, destacan varias (abajo las repasamos todas), pero quizá una lo hace especialmente, la referida a los sistemas de almacenamiento con que ya cuenta el parque de autoconsumos nacional. UNEF presta especial atención a ese ítem en su Informe 2023 "con el objetivo de obtener los primeros registros de almacenamiento detrás del contador y ser capaces de dimensionar y plantear una hoja de ruta para hacer frente a las necesidades del sector de la energía solar, en particular, y de las energías renovables, en general, en este ámbito". Y el resultado de esa atención es el susodicho: en 2022 -según los datos recabados por la asociación- se almacenaron detrás del contador 1.382,84 MWh de energía solar en España, de los cuales, 692,44 MWh corresponden a instalaciones conectadas a la red y 690,39 MWh de autoconsumo aislado.
En cuanto a la potencia fotovoltaica instalada en modo autoconsumo, el Informe señala que el año pasado se pusieron en marcha en el país 2.507 megavatios, cifra que ha supuesto un incremento del 108% con respecto a 2021, cuando los autoconsumos instalados por toda la geografía nacional sumaron 1.203 megas (MW). Así, a finales de 2022, España ya contaba con 5.249 MW de potencia acumulada en instalaciones solares fotovoltaicas para autoconsumo.
En cuanto al reparto por sectores, la mayoría de esta nueva potencia, un 47%, se instaló en el sector industrial; un 32%, en el sector residencial; un 20%, en el sector comercial; y el 1% restante, en instalaciones solares para autoconsumo aisladas de la red.
Concretamente, en 2022 se han instalado en torno a 200.500 instalaciones residenciales con autoconsumo en España. UNEF destaca en su informe que el sector que más ha incrementado en 2022 su porcentaje de instalación, del 41% al 47%, ha sido el industrial.
Pero quizá uno de los datos más llamativos sea el que preside esta información. Según el Informe Anual UNEF 2023, una de cada tres instalaciones de "autoconsumo doméstico" ya cuenta con un sistema de baterías.
A la vista de todo ello, y, "con estas cifras -considera la asociación-, se establecen las bases para el cumplimiento de los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima para 2030, pues en los últimos tres años se han incorporado 11,1 GW de capacidad en suelo y 4,3 GW de capacidad de autoconsumo".
La previsión parece optimista, pues el último borrador del Plan establece como objetivo fotovoltaico 2030 alcanzar los 76.387 megavatios de potencia (y ahora mismo hay 22.647, según Red Eléctrica) y fija por otro lado como objetivo de autoconsumo los 19.000 MW (ahora habría unos 7.000).
Más datos sobre el almacenamiento
La asociación calcula que de las instalaciones de autoconsumo puestas en marcha en 2022 alrededor de un 10% tiene sistemas de almacenamiento detrás del contador asociados, mientras que, respecto a las instalaciones aisladas, el 66% cuenta con un sistema de baterías.
El anuario concluye que "la capacidad de almacenamiento para autoconsumo se encuentra en los 260 MW, teniendo en cuenta que el número de horas de funcionamiento de una batería a menudo es modular y se consideraron entre 2 y 4 horas de funcionamiento, para instalaciones conectadas a la red".
Por lo demás, y más allá del autoconsumo, el año 2022 ha superado al año 2021 y se consolida como el mejor año de la historia del sector fotovoltaico en España contando con 25.113 MW de potencia fotovoltaica acumulada (casi 20.000 sobre suelo y para vertido a red; el resto, en modo autoconsumo).
En plantas en suelo, España sumó el año pasado 4.701 MW (4,7 gigas), un crecimiento de casi un 25% frente a los 3,5 GW incorporados el año 2021. La gran mayoría de esta nueva capacidad -recuerdan desde la asociación- se ha introducido en el mercado "sin ningún tipo de ayuda o esquema retributivo regulatorio", como ya sucediera en 2021.
El año 2022 Extremadura se ha erigido como la comunidad autónoma líder en desarrollo fotovoltaico, con 1.467 MW, es decir, un 31% de la potencia instalada a nivel nacional.
Sobre los dineros
España fue en 2022 el mercado líder europeo en PPAs (contratos bilaterales de compraventa de electricidad de largo plazo), y lo hizo -destaca UNEF- precisamente gracias a la tecnología fotovoltaica.
El impacto directo económico del sector fotovoltaico sobre el PIB nacional ha ascendido en 2022 hasta los 7.014 millones de euros. En cuanto a la balanza comercial, las exportaciones han aumentado en un 84%, consolidando el papel exportador de España.
"Los datos de 2022 -apuntan desde UNEF- confirman la tendencia, dado que se ha registrado un incremento de 1.933 millones más que en 2021 en cuanto a exportaciones". Por otro lado, aunque la balanza sigue siendo positiva en términos de exportaciones, las importaciones se han incrementado en un 97% con respecto a 2021.
Cuarenta mil puesto de trabajo directo
A nivel nacional se han empleado un total de 138.283 personas de forma directa e indirecta (40.683 y 97.600 personas, respectivamente). Esta cifra asciende a 197.383 personas si incluimos los empleos inducidos.
Este año, a diferencia de 2021, la sección de ingenierías e instaladores ha empleado a 16.751 personas, convirtiéndose en el segmento que más empleos directos ha producido dentro de la cadena de valor de la industria fotovoltaica. UNEF también destaca el incremento en el número total de empleos directos, el cual ha alcanzado los 40.683 puestos de trabajo.
Producción de electricidad
Tradicionalmente -explica el Informe-, la fotovoltaica estaba estabilizada en torno a un 3% de contribución al mix, pero en 2020 esta cifra ya alcanzó el 6,9%; aumentó en 2021 hasta el 8,1%; y en 2022 ha llegado al 10,1%. Según el último dato de Red Eléctrica, esa aportación ha superado ya los quince puntos entre enero y agosto del corriente (15,1%).
Respecto al "conjunto de las renovables" (eólica, biomasa, termosolar, etcétera), la fotovoltaica también incrementa su peso: en 2022, la fotovoltaica supuso el 25% de la generación renovable, siendo de un 21% en 2021, cuando tradicionalmente ha venido oscilando entorno al 7%.
I+D+i
En lo que concierne a la Investigación, Desarrollo e Innovación, el gasto por parte de las compañías del sector ha experimentado un notorio crecimiento en los últimos años. En 2022 el gasto en I+D+I ascendió a 650 milones de euros, un 60% más que el año anterior donde se alcanzaron los 407 millones.
Dentro de las diversas actividades consideradas, UNEF resalta en su Informe 2023 "el compromiso de las empresas fabricantes, quienes destinaron el 5,47% de sus ingresos a actividades de innovación tecnológica, alcanzando una cifra de 153 millones de euros en el año 2022".
La intensidad en innovación del sector de la energía fotovoltaica en su conjunto (3,5%) sobresale en relación a la media de las empresas españolas (2,3%) y por encima del promedio de la industria nacional (2,2%).