“Nuestro enfoque, centrado en el cliente, ayuda a los propietarios de viviendas a realizar la transición a la energía limpia de manera cómoda y sencilla, al mismo tiempo que ahorran dinero”. Lo dice Wouter Draijer, cofundador de SolarMente, una startup que ofrece un producto (autoconsumo) llave en mano: ingeniería, instalación, financiación, tramitación y mantenimiento. A Wouter Draijer y Víctor Gardrinier les llamó la atención, al llegar a España, la escasa presencia de instalaciones solares fotovoltaicas en las viviendas, “cuando este país -apunta el primero- debería ser el paraíso para la energía solar”, habida cuenta de las casi 3.000 horas de Sol anuales con las que cuenta, muchas más en todo caso que “en otros países solares exitosos -añade-, como Holanda o Alemania (con 1.600 horas de sol por año), y que tienen casi 80 veces más instalaciones fotovoltaicas residenciales”.
El caso es que les sorprendió -cuentan- el mucho recurso y el poco aprovechamiento y luego volvieron a sorprenderse porque, al hablar con clientes potenciales -añaden-, descubrieron que “la experiencia solar en España es muy lenta y compleja para los usuarios, con un promedio de 4 a 6 meses de trámites, unas 30 interacciones entre los futuros usuarios y las empresas que ofrecen el servicio (correos electrónicos, llamadas, mensajes), un proceso tedioso que genera falta de confianza entre los usuarios”.
¿Resultado?
Han fundado SolarMente, una startup que quiere restablecer la confianza de todos esos potenciales clientes mediante una “experiencia completa” que lo incluye todo: ingeniería, instalación, asistencia al cliente, financiación, trámites y seguimiento 24/7. La pyme de Wouter y Víctor propone así “un modelo de negocio centrado en el cliente: atención personalizada” y promete ahorros que van desde los 300 hasta los 1.200 euros anuales. ¿Su propuesta? Una inversión media que puede oscilar entre los 4.500 y los 12.000 euros y, una vez puesta en marcha la instalación, “lo único que se necesita es un mantenimiento cada 3 años; la duración de funcionamiento asegurado de estas placas es de 25”.
Wouter Draijer, cofundador de SolarMente: “queremos un mundo con energía limpia y estamos convencidos de que cada persona es fundamental en la transición energética, por eso, nuestro trabajo consiste en simplificar y rentabilizar la energía solar para llegar a mucha más gente”
SolarMente dio sus primeros pasos en la primavera del año del Covid, mayo de 2020 y, “desde entonces -explican sus cofundadores-, la red de clientes crece un 30% al mes”. Así, no es de extrañar que se hayan planteado como objetivo a cinco años vista la instalar placas “en 50.000 hogares españoles, lo que equivale a generar 421 GWh de energía verde al año”.
Pero no solo. Porque SolarMente -aseguran- ha nacido para cambiar el paradigma de la energía solar en España. “Los paneles solares están mejorando, cada vez son más baratos y eficientes, pero -apunta Víctor- el software no ha experimentado mejoras importantes”. Y es ahí donde esta pyme ha fijado uno de sus principales objetivos: quieren ofrecer energía 100% limpia, sí, pero, además, quieren ahondar en una cierta tecnología de vanguardia “con el fin de optimizar el ahorro y devolver el control de la energía al propietario”: el blockchain. “Si logramos esto, el usuario será cada vez más independiente y capaz de controlar su producción al margen de las grandes empresas”, asegura Víctor, que añade que “estamos en el camino para lograr un consumidor más libre y un mundo más limpio”.
Qué es
SolarMente se define como una startup española que se encarga de todo el proceso de la experiencia solar: desde la ingeniería a la instalación, la asistencia al cliente, la financiación, los trámites y el seguimiento. En los próximos 5 años, la startup espera realizar 50.000 instalaciones y se propone ofrecer cargadores y baterías vehículo eléctrico.
