Un total de 27 municipios se han adherido a la iniciativa de la Diputación de Málaga pro-creación de comunidades energéticas, iniciativa que forma parte de Málaga Viva, "programa estratégico de la Diputación para la lucha contra el cambio climático en la provincia". Según explica la propia Diputación, tanto el servicio de Cambio Climático como el de Arquitectura, Planeamiento e Información Territorial han trabajado de manera coordinada con los ayuntamientos de esas localidades para analizar el potencial de cada municipio de generación de energías renovables. Los resultados del estudio apelan a varias fuentes de energía limpia. En cuanto a las posibilidades de implantar energía minihidráulica, la Diputación ha identificado dos municipios, Alameda y Benaoján, que podrían disponer de potencial "gracias a antiguas instalaciones actualmente en desuso". Por ello, "se estima conveniente -apuntan desde la propia Diputación- estudiar la viabilidad económica de la recuperación de la Aceña de los Martínez, en Alameda, y del Molino del Santo, en la Estación de Benaoján".
Por lo que se refiere al posible uso de energía eólica, 21 municipios (el 78% de los estudiados) podrían recibir peticiones de proyectos para la implantación de instalaciones minieólicas en el término municipal.
En materia fotovoltaica, "la totalidad de los pueblos disponen de cubiertas para la generación de energía fotovoltaica que cubra parte de la demanda de sus edificios con un periodo medio de retorno de la inversión en torno a siete años".
Además -añaden desde Diputación-, el 75% de los municipios dispondrían de excedentes para compartir la energía generada, "que podría destinarse a autoconsumo colectivo compartido o a favorecer la formación de una comunidad energética".
Por lo que respecta a biomasa y biogás, la generación de energía térmica relacionada con estas dos fuentes de energía supone, según la Diputación, "unos costes de implantación muy altos".
La Diputación de Málaga recuerda en ese sentido que está llevando a cabo el proyecto Bio+a Málaga "para la implantación de calderas de biomasa en una veintena de edificios públicos de los municipios de la Sierra de las Nieves con una inversión de 6,5 millones de euros".
El proyecto en cuestión -adelantan- se extenderá también al Valle del Genal, donde ya se han realizado los proyectos de ejecución, y al Valle del Guadiaro, con sus correspondientes estudios previos concluidos, "y posteriormente se implantará en la Sierra Norte y la comarca de Antequera".
Otros 12 municipios han solicitado asesoramiento para que en 2025 la Diputación estudie la posible puesta en marcha de comunidades energéticas: Ardales, Benamargosa, Cañete la Real, Carratraca, Cuevas de San Marcos, Faraján, Gaucín, Sayalonga, Sedella, Tolox, Villanueva de Algaidas y Villanueva del Trabuco.
Los 27 municipios interesados en esta iniciativa han sido: Alameda, Alfarnate, Almáchar, Almogía, Arenas, Arriate, Benalauría, Benaoján, Benarrabá, Canillas de Albaida, Cartajima, Casabermeja, Casarabonela, El Burgo, Fuente de Piedra, Guaro, Iznate, Jimera de Líbar, Jubrique, Manilva, Moclinejo, Monda, Montecorto, Montejaque, Teba, Totalán y Villanueva del Rosario.